San Isidro, la verbena más chula
Las fiestas de San Isidro se expanden por toda la ciudad con propuestas que incluyen conciertos en directo, talleres infantiles, zarzuelas y cocidos populares
A San Isidro Labrador se le daba bien encontrar agua. De hecho, del agua le viene su santidad. Cuenta la leyenda que una tarde el patrón de Madrid estaba labrando las tierras de su amo cuando este apareció muerto de sed: “Cuando Dios quería, aquí agua había”, dijo Isidro golpeando una roca. El líquido empezó a manar justo donde se encuentran la fuente y la ermita que le honran. Desde este viernes y hasta el 15 de mayo, en sus alrededores se concentran más de un centenar de conciertos y actividades, que salpicarán de chulería toda la ciudad.
“Esta es la fiesta de la calle. Buscamos que los espectáculos sean plurales y que haya paridad en las disciplinas”, adelanta José Morán, director artístico de las actividades. El periodista, escritor y humorista Juan Luis Cano, conocido por ser parte del dúo Gomaespuma, será el pregonero en la plaza de la Villa. El arranque musical estará a cargo de la mujer de las gafas oscuras y Premio Nacional de Música, Martirio. Inaugura San Isidro 2017 con la Banda Sinfónica Municipal de Madrid en la Plaza Mayor. “Es la primera vez en mi vida que doy un concierto con la banda sinfónica, con temas seleccionados de los 30 años de mi carrera. Me siento muy honrada”, afirma. La artista adelanta que habrá chotis, flamenco, copla y hasta Lorca, ya que su poesía aparece en el último disco de la artista, El aire que te rodea. Martirio —que se autodefine arqueóloga musical— celebra la diversidad que recoge el programa de esta edición de San Isidro: “Las nuevas voces de España están haciendo un trabajo musical muy importante”.
Durante todo el fin de semana actuarán Nakany Kante, Matretta, Leska, Begun, y Surfin’Bichos, entre otros. Los gallegos Triángulo de Amor Bizarro están felices de compartir escenario con esta última banda. Rafa Mallo, el batería, lo explica: “Es un honor que piensen en nosotros para estas fiestas y tocar el mismo día que Surfin’Bichos. Nosotros no nos entenderíamos sin este grupo”.
El director artístico de la fiesta afirma que dentro de la música más contemporánea intentan abarcar varios estilos posibles. En una fiesta que homenajea la casticidad madrileña no podían faltar a Marí Pepa de Chamberí, Olga María Ramos y La Shica. Las tres se presentarán el lunes en Las Vistillas a partir de las 20.00.
Pero no todo será escuchar bandas en vivo. En la Pradera de San Isidro, el lugar más castizo y emblemático de las fiestas, habrá pasacalles, chotis y pasodobles. También habrá reparto de cocido madrileño. ¿El postre? Tontas y listas, como corresponde. La bollería de Panod (Calle de Prim, 1) ofrecerá estas rosquillas tan especiales, elaboradas artesanalmente.
Para los que quieran aprender a bailar el chotis, durante estas fiestas tienen su mejor oportunidad. En el Mercado de Motores (Museo del Ferrocarril; Paseo de las Delicias, 61; entrada gratis) habrá demostraciones y clases el sábado (desde las 14.30), el domingo (12.30) y el lunes (14.30). A los que no se les dé bien lo de bailar tiesos, podrán probar su voz en las jam session.Se podrá escoger una canción de un listado de 50 y no hay que preocuparse por la banda: los músicos los pone el mercado y la voz, el que se anime.
Para enseñar Madrid a través de la fiesta de San Isidro, el Ayuntamiento ha decidido dedicar a diversas disciplinas artísticas varios espacios emblemáticos de la capital. Así, en el Templo de Debod invita a disfrutar de los atardeceres escuchando conciertos de música clásica, género que también sonará con la puesta de sol en la plaza de Oriente. En la Rosaleda del parque del Oeste se apuesta por las músicas del mundo y la percusión, mientras que en la plaza de Olavide los protagonistas son las bandas callejeras. En la plaza Pedro Zerolo resonarán acordes de jazz (14.00 desde el sábado hasta el lunes), y en la de los Carros (20.00) se podrá disfrutar de diversas brass bands (música realizada con instrumentos de bronce).
Zarzuela en la calle
El género más castizo no podía faltar en esta fiesta. Sale a la calle de la mano del Teatro de la Zarzuela (referente del género lírico español desde 1856) en coproducción con el Ayuntamiento. El próximo lunes (22.00; gratis hasta completar el aforo de 11.000 personas) la Plaza Mayor acogerá la representación de una selección de zarzuelas. “No es solo para los que sienten nostalgia de ese género, sino también para los que lo quieren descubrir”, dice Daniel Bianco, director del Teatro de la Zarzuela, que se muestra entusiasmado con la idea de darle visibilidad.
Es la primera vez que el equipo del teatro cambia las bambalinas por las aceras. “Y qué mejor que hacerlo en la Plaza Mayor”, apunta Bianco, “que siempre ha sido un punto de encuentro para los madrileños”. Zarzuela en la calle es una obra escrita por Enrique Viana, en la que se han seleccionado temas de grandes compositores como Federico Chueca (La Gran Vía, firmada junto a Joaquín Valverde), Francisco Asenjo Barbieri (El Barberillo de Lavapiés) o Amadeo Vives (Doña Francisquita). En escena, más de 140 artistas en el corazón de la capital. Una representación por todo lo alto para honrar al patrón más chulapón.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.