La empresa de la explosión de Tarragona plantea un ERE temporal mientras sigue inoperativa

La dirección de la empresa IQOXE pretende aplicar a sus trabajadores un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) mientras no se pueda reiniciar la actividad en su planta de La Canonja, que el pasado 14 de enero quedó destrozada tras una violenta explosión, en la que murieron tres personas y otras siete quedaron heridas. La compañía defiende que la medida procede por "causas de fuerza mayor" y mantiene que, con ella, trata de "defender" las condiciones laborales de la plantilla, integrada por 116 operarios.

Según ha apuntado un portavoz de IQOXE, las negociaciones con los representantes de los trabajadores no están cerradas pero, mientras, la empresa sí trata de convencer al departamento de Trabajo de la Generalitat de la necesidad de adoptar el ERE temporal. IQOXE apunta que, con esta solución, la administración pública asume parte de las pérdidas de la empresa pero se posibilita que el personal conserve el salario y las cotizaciones. El sindicato CCOO ha reaccionado rechazando de manera rotunda la posibilidad del ERE y ha apuntado que la estrategia perseguida por la dirección de la empresa es un ejemplo más de "la actitud mercantilista" de la compañía.

Desde que explotó la planta el mes pasado, se ha intensificado el discurso que relaciona a IQOXE con la precariedad laboral y el exceso de carga de trabajo para una plantilla corta de efectivos. Se trata de una tesis que siembra dudas sobre la seguridad que había en la planta pero que la empresa ha tratado de desmentir manifestando que, en el último año, el número de trabajadores había crecido gracias a la política de contrataciones.

IQOXE insiste en que planteando el ERE trata de "proteger a los trabajadores" mientras no se pueda recuperar la producción. La planta de La Canonja está parada y centra la investigación que tiene abierta, y bajo secreto de sumario, el juzgado de Tarragona. El objetivo es aclarar las causas que provocaron la explosión y de saber porque fallaron los mecanismos de seguridad que deberían de haber detectado el aumento de presión en el reactor.

Tras la explosión, la dirección de IQOXE emitió un comunicado lamentando los hechos y asegurando que estaba garantizado "el futuro de la empresa y el mantenimiento de todos los puestos de trabajo", una promesa que recuerdan ahora los representantes sindicales. Además del personal que está contratado directamente por la compañía, IQOXE también da trabajo a casi un centenar de trabajadores de empresas auxiliares.