El Capitán América gobierna la ACB
Justin Doellman, el jugador más valorado de la liga, lidera la firme apuesta del Valencia de Perasovic, segundo clasificado
El mejor jugador de la Liga ACB tiene porte de gentleman, responde al apodo de Capitán América y anota canastas sobre la bocina con temple de cirujano. Justin Doellman lució su estado de gracia en Vitoria con sobriedad y acierto y, con un alley-oop a falta de 2,6 segundos para el final del partido, tumbó al Baskonia (78-79) y consolidó al Valencia de Perasovic en el segundo puesto de la clasificación. Los taronja, que comenzaron la Liga con una derrota in extremis ante el Barça en el Palau (75-74), suman ocho victorias consecutivas (el mejor arranque del club en los últimos 15 años) y son hasta la fecha el único equipo capaz de seguir la estela del invicto Madrid.
El ala-pívot estadounidense, de 28 años y 2,08 metros, es el primero en el ranking de valoración (21,7), el segundo máximo anotador (17,6, solo por detrás de Sekulic: 17,7) y el mejor recuperador del campeonato (2,3 por partido). “Todo marcha perfecto. Juego en un equipazo y estoy en el mejor momento de mi carrera. Me siento más cómodo que nunca”, resume Doellman antes de tomar el vuelo de vuelta a Valencia con la misma sencillez con la que lidera al conjunto de Perasovic. Él y su técnico fueron elegidos MVP y mejor entrenador de noviembre. “Es el segundo año de ambos, me ha dado mucha confianza y he crecido como jugador. Es un reto jugar a este nivel. Somos ambiciosos”, cuenta.
Aficionado a la escalada y al triatlón y enamorado de la música de Coldplay, empezó a jugar al baloncesto a los nueve años y en poco tiempo descubrió su vocación. En su etapa en el instituto, en el Ryle High School de Kentucky, acaparó todos los récords del equipo con tal suficiencia que su dorsal 11 fue retirado para rendirle pleitesía. Imparable en su progresión, en 2003 llegó a la Xavier University de su Cincinnati natal (por la que también pasó su compañero Romain Sato) donde estudió Ciencias de la Comunicación y pulió su talento. Pero en 2007 la NBA le cerró sus puertas. Nadie se acordó de él en un draft carísimo en el que Marc Gasol fue elegido por los Lakers en segunda ronda en el puesto 48.
Los de Perasovic siguen la estela del Madrid con su mejor arranque en 15 años: ocho victorias y una derrota
Con la maleta llena de desencanto dio el salto a Europa. De Cincinnati a Cholet en un periplo de tres años en Francia en los que hizo parada en Besançon y Orleans, redoblando en cada estación sus prestaciones. 12,4 puntos con 12,8 de valoración media en su primera participación en la Euroliga le colocaron en el escaparate. Desde el día que sumó 27 de valoración ante Unicaja en apenas 21 minutos, la ACB no le quitó ojo. El Alicante fue el primero en apostar por él; un año después, en Manresa, se convirtió en el segundo máximo anotador de la Liga; y, en el verano de 2012 el Valencia le reclutó para apuntalar el lustroso proyecto de Perasovic. El curso pasado ya fue el máximo anotador de la Liga por delante de Carroll y en este ha ampliado su excelencia. Polivalente, buen defensor y gran lector del juego, se codea en las estadísticas con Mirotic, al tiempo que aparece en todas las quinielas para sustituir al montenegrino en el Madrid si este decide hacer las Américas rumbo a Chicago.
“Es un ejemplo de profesionalidad, por su trabajo y por la forma en la que se involucra. Se preocupa de conocer a los rivales y aconseja a los compañeros. Es crucial en los partidos y durante la semana”, explica Juanjo Rojo, segundo ayudante de Perasovic. “No responde al prototipo de líder acaparador de juego y protagonismo. Es un líder silencioso, sobrio y tenaz”, remata. En su año en Manresa, un par de excelsos mates en un entrenamiento dejaron tan impresionados a sus compañeros que le valieron el apodo de Capitán América. Él continuó la chanza e incorporó a su repertorio un saludo marcial tras cada canasta o victoria relevantes. Este curso, el superhéroe del Valencia gobierna la ACB y los rivales se cuadran ante él.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.