Caótica situación administrativa de la mayoría de los catedráticos y agregados de universidad sin plaza
Los catedráticos y agregados de universidad aprobados sin plaza se encuentran constituidos en asamblea permanente en el colegio mayor Alfonso el Sabio, en espera de ser recibidos por el ministro de Educación y Ciencia, Iñigo Cavero, quien hasta ahora no se ha pronunciado sobre el tema ni se ha comprometido a entrevistarse con ellos.
Hasta el momento han sido censados un centenar largo de profesores universitarios en quienes coincide la situación de que, aun habiendo aprobado todos y cada uno de los ejercicios de las oposiciones para ingreso en los cuerpos de catedráticos y agregados de universidad y pese a existir plazas dotadas y vacantes numerosas en los mismos, no han sido incorporados a los respectivos cuerpos docentes.A medida que el problema está siendo más aireado por los medios informativos, se van conociendo más casos de profesores afectados que se incorporan a la agrupación constituida hace tiempo por estos docentes para defender sus derechos. «No esperamos, no obstante, que el número total de casos supere a 150», han dicho a EL PAÍS portavoces de la agrupación.
«Pedimos -añadieron- que la Administración reconozca nuestro derecho a ser integrados "en expectativa de destino" en los cuerpos docentes del Estado, lo que no supone, como parece que está siendo entendido por algunos, que exijamos nuestra adscripción inmediata a una plaza determinada.»
Lo que en definitiva reclaman estos docentes es que las autoridades ministeriales adopten para su problema una política coherente con la que se ha seguido para los aprobados sin plaza de los cuerpos de EGB y BUP y con la filosofía sobre acceso a la, función docente que subyace en la propuesta del actual equipo rector del departamento de Educación y Ciencia en el anteproyecto de ley de autonomía universitaria.
En efecto, en dicho anteproyecto se separa la habilitación para la función docente de la adscripción a la plaza de una determinada universidad. Los aprobados sin plaza tienen ya esa habilitación. Lo que piden es que la Administración la reconozca jurídicamente. La adscripción mediante concurso de méritos puede esperar el tiempo que sea necesario.
Cuando se califica de «irracional» al sistema deoposiciones como fórmula para el acceso a la docencia parece ponerse el énfasis en los aspectos metodológicos del concurso-oposición: memorización, primacía de lo teórico sobre lo práctico y escasa o no suficiente ponderación de la capacidad didáctica; p ero no se suele reflexionar suficientemente acerca de la irracionalidad de la dinámica administrativa que el actual sistema de oposiciones lleva consigo.
Así sucede que entre este centenar de profesores se dan toda una serie de situaciones absolutamente incomprensibles. Está el caso del agregado numerario que, por tener aprobada sin,plaza .la oposición a cátedra, sigue actuando como agregado y ocupando la plaza que no tiene un adjunto, también numerario, que aprobó dos o tres veces la oposición para agregado. Y la cadena continúa, porque el Ministerio afirma no tener plaza de adjunto para un no numerario que aprobó la oposición para dicho cuerpo docente.
Entre tanto, puede darse el caso de que esté ejerciendo como en cargado de clase, desempeñando la función de un agregado, un profesor que ni es catedrático, ni agregado, ni adjunto y que, por añadidura, jamás se ha presentado a un concurso-oposición.
«Este colectivo de profesore -afirma la mencionada agrupa ción de los sin plaza- no ha rechazado las oposiciones, ni pre tende rebajarlas garantías de ca pacitación científica y pedagógica exigibles a todo candidato a la docencia universitaria. »
El curriculum de uno de lo profesores afectados puede ser suficientemente expresivo. Se trata de un doctor en medicina que ha aprobado las oposiciones a la cátedra de Medicina Legal en las convocatorias de 1967, 1970 y 1974. Ha aprobado, pues, los seis ejercicios de cada concurso tres veces, obteniendo además dos votos sobre cuatro en la primera de las tres convocatorias, uno sobre tres en la segunda y el voto favorable de las tres universidades para las que se convocaba cátedra en la última. Es académico numerario electo de una Real Academia de Medicina y correspondiente de otra; jefe del Servicio de Medicina Preventiva de un hospital universitario; durante cinco cursos ha sido encargado de una cátedra de Medicina Legal dirige tesis doctorales, ha publicado 58 trabajos científicos en España y nueve en el extranjero y publicado dos monografías... Pues bien, este profesor sigue reducido a la condición de adjunto numerano, que es la única oposición que le ha dado derecho a plaza, y su caso es uno solo entre muchos.
La apretada agenda de trabajo del ministro de Educación para los próximos días no permite pensar que la reunión con los representantes de la agrupación pueda efectuarse de manera inmediata. Estos han manifestado que no desean adoptar posturas de fuerza porque están plenamente convencidos de que sus razones serán atendidas.
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