El sector PSOE de los socialistas catalanes pretende un congreso extraordinario

Tras la división material, aunque no formal, del partido socialista en los dos colectivos de origen, PSC y PSOE, en el último congreso celebrado en Barcelona, el sector procedente de la ex federación catalana del PSOE tiene la intención de lanzar la alternativa de una celebración de un congreso extraordinario que logre una salida al actual conflicto.

Dirigentes de este sector manifestaron, a este diario que tras el último congreso había quedado muy patente la existencia de dos proyectos políticos y que la única fórmula para poder salir adelante era la de llegar a un punto intermedio entre los dos proyectos para conseguir uno común. Asimismo insistieron en que no se trataba de elaborar un programa común, «sino de algo mucho más profundo». Una vez conseguido este proyecto, los militantes de la ex federación catalana del PSOE, formada esencialmente por los sectores inmigrados de la población, exigirían la formación de una ejecutiva, que denominan «común», que fuese capaz de llevar a cabo el proyecto político.A pesar de todo, reconocieron que el congreso en sí quizá no solucionaría muchas cosas, pero por lo menos «saldría algo mejor con lo que poder trabajar».

Hasta el momento, según las mismas fuentes, el mencionado sector todavía no ha planteado este tema a la actual ejecutiva, encabezada por Joan Reventós, y que cuenta con el 54% de los votos, ni siquiera han tenido ningún contacto. También afirmaron no tener ningún plan previsto, «pero en el momento adecuado», afirmaron, «lanzaremos la idea».

Al mismo tiempo, fuentes de la ejecutiva federal del PSOE manifestaban a este diario la intención de proponer alternativas para encontrar una salida a la actual división, que ha dejado a todo el sector de la inmigración al margen de la dirección del PSC-PSOE. Precisamente, de este sector provienen la mayor parte de los votos electorales de este partido. «Antes de octubre, el problema debería quedar zanjado», afirmaron a este diario las mismas fuentes, «pero la solución deberá salir de Cataluña, no de Madrid».

En esta operación de acercamiento de los dos ex colectivos podría resultar ampliamente beneficiado el diputado y consejero económico de Felipe González, Ernest Lluch, a quien los dirigentes del PSOE catalán estarían dispuestos a proponer como secretario general, al mismo tiempo que sería una candidato muy bien visto por la comisión ejecutiva federal del PSOE. Por el contrario, Joan Reventós sería el «gran perdedor», según afirmaron a este diario diversas fuentes, «ya que, al encabezar una, ejecutiva formada por un solo sector en el pasado congreso, ha dejado de ser el hombre capaz de conseguir la unidad, si es que alguna vez ha sido esa su intención».

Los dos sectores en que se encuentra dividido actualmente el PSC-PSOE representan las dos comunicades existentes en Cataluña. Alrededor del PSC se encuentra la comunidad catalana, que es la que en estos momentos dirige el partido, tanto en la comisión ejecutiva como en el consejo nacional. Su máximo dirigente es José María Obiols, actual secretario de organización, así como miembro de la comisión ejecutiva federal del PSOE y diputado en las Cortes. En el sector de la antigua federación socialista catalana del PSOE se encuentra toda la inmigración, y su cabeza visible es el asturiano Carlos Cigarrán, también miembro de la comisión ejecutiva federal del PSOE y diputado al Parlamento catalán. Ambos sectores se enfrentaron muy duramente en el último congreso del partido, abandonando el mismo el sector del PSOE que defiende posturas de «entendimiento» con Convergencia Democrática, mientras que el sector PSC mantiene actitudes de acercamiento al PSUC.