Desolación y lágrimas entre la población de Isla Cristina

Isla Cristina (Huelva) conoció ayer, pasadas las ocho de la tarde, la noticia del hundimiento del sardinero Islamar III, después de que uno de los representantes de la entidad propietaria del buque, Usisa (Unión Salazonera Isleña, SA), desplazado a Las Palmas de Gran Canaria para seguir de cerca las labores de rescate, confirmara el percance a uno de los familiares. La desolación y las lágrimas entre la población aumentaron al conocerse la temida noticia.Poco a poco se fueron confirmando datos, como la recogida de cuatro cadáveres no identificados por parte del barco congelador Nache II, así como un superviviente, el segundo patrón, José Martín Lozano, que se encontraba sobre las redes del barco intentando mantenerse a flote. En esta situación se mantuvo durante más de 48 horas, hasta que fue recogido por el citado pesquero gravemente herido.

Después las familias supieron que otro buque había detectado una balsa, que podría corresponder a supervivientes del Islamar III, por lo que se intensificaron las labores de rescate, especialmente por parte del Oliver, barco hermano del desaparecido. Sin embargo, llegada la medianoche no se tenían nuevas noticias sobre la suerte de los tripulantes. Así las cosas, las escenas de dolor se sucedieron en la localidad onubense, que se vistió de luto. Prácticamente todos los hogares de Isla Cristina tienen alguna relación con los tripulantes, por lo que no era extraño encontrar caras destempladas y lloros en gran número de familias. Mientras tanto, se interrumpió toda la alegre vida isleña y cientos de personas se trasladaron a las oficinas de Usisa, situadas en el centro de Isla Cristina, donde se esperaban noticias sobre los marineros.

La tripulación del Islamar III estaba integrada por las siguientes personas: Juan Alonso Acosta, patrón de pesca; Francisco Segura Lozano; patrón de altura; José Martín Lozano, segundo patrón; Juan Alonso Martín, patrón de botes; Germán Bermejo Lorenzo, encargado de abiertas; Manuel Félix Correa, cocinero; Agustín Crías Rey, patrón bote panda, y los marineros Domingo Martín Martín, Andrés García Fernández, Manuel de la Rosa Jaén, Enrique Cimas Delgado, Rafael López Beltrán, Juan Viegas Lorenzo, José Martín Gutiérrez, Antonio Gutiérrez Fernández, Manuel Castillo Pérez, Juan Antonio Sosa Martín, Antonio Martín Castillo, Lázaro López Beltrán, Pedro López Beltrán, Ángel Domínguez Ruiz, Manuel González Rodríguez, Manuel Cordero Crespo, Manuel González González, Domingo González Pérez, José Colisa Ramos y los súbditos marroquíes Amar Agri y Lamsen Indus.

Se da la circunstancia de que el hasta ahora único superviviente se incorporó a la dotación del buque pocas horas antes de que éste se hiciera a la mar, el pasado 28 de julio, dado que sustituyó a su tío, Juan Fortuna, que, por repentina enfermedad, se quedó en tierra. José Martín Lozano es soltero y tiene 29 años.

El Islamar III se hacía a la mar a veces durante seis meses seguidos y siempre se dedicó, desde que fue construido en 1971, a la pesca de la, sardina. Con 30,27 metros de eslora y 7,21 de manga, era considerado por sus armadores como un barco bastante seguro, razón que hasta el último momento hizo mantener las esperanzas de que se tratara de un apresamiento.

El único superviviente ftie trasladado, junto con los cuatro cadáveres, en un helicóptero del SAR a Las Palmas de Gran Canaria, donde llegó a las 21.30 horas. Fue hospitalizado en un centro sanitario para su recuperación. En Isla Cristina se ha truncado un verano que se presentaba lleno de esperanzas, después de que muchos barcos se hubieran hecho a la mar tras un proceso de reconversión tecnológica al que prestó apoyo la Junta de Andalucía.