El Instituto Nacional de Hidrocarburos obtuvo 14.363 millones de beneficios en 1984

El grupo de empresas del Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH) registró en 1984 un benericio antes de impuestos de 14.363 millones de pesetas, cifra que representa un 22% de mejora con relación al año anterior. Por vez primera, según anunció ayer su presidente, Óscar Fanjul, ninguna empresa del grupo recibió subvenciones corrientes del presupuesto del Estado, e incluso una de ellas, Butano, devolvió 4.500 millones recibidos el año anterior.

Más de la mitad del beneficio del grupo se debió al ejercicio de Campsa, que tuvo unos resultados positivos, antes de impuestos, de 10.872 millones de pesetas, de los que sólo 2.771 millones correspondieron a la gestión del monopolio. Según fuentes de la compañía, el pasado ejercicio fue el mejor de su historia.Ayer, la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos aprobó la transferencia de activos de la sociedad distribuidora de las empresas de refino, en los porcentajes previstos en el protocolo que las empresas del sector firmaron con el Gobierno en verano de 1983. El Consejo de Ministros del miércoles ratificrá definitivamente el acuerdo al que el INH llegó la semana pasada con el sector privado para esta transferencia, en la que el Estado se reserva la mayoría del capital social.

Del ejercicio del grupo INH en 1984 destacan los resultados extraordinarios, negativos en 22.812 millones de pesetas, fruto de la aplicación de 18.312 millones de pesetas a saneamiento por depreciación de la moneda. El cash flow (beneficio más amortizaciones) fue de 73.484 millones de pesetas, un 3% superior al del ejercicio precedente. La faturación creció un 11 % y el aumento de los resultados de explotación fue del 52%.

Las dos empresas de refino del INH -EMP y Petroliber- ofrecieron resultados dispares. El beneficio de EMP fue de 3.142 millones de pesetas, de los que sólo un tercio correspondió al refino mientras que el resto fue consecuencia del buen año de la petroquímica. Por vez primera, todas las filiales petroquímicas de EMP arrojaron resultados positivos. Por su lado, Petroliber, debido al estrechamiento del diferencial de crudo, que tiene grave repercusión en una empresa de elevado grado de conversión como ésta, perdió 1.830 millones, con un cash flow positivo de 564 millones.

Por su parte, Enagas experimentó una importante mejora en el resultado de explotación, al pasar éste de 3.770 millones (negativos) a 1.216 millones (también negativos). La mejora va en función de que, en 1984, la sociedad no tuvo una subvención de 6.500 millones por parte del Estado, como sucedió en 1983 y que incluyó en sus resultados de explotación.

Hispanoil y Eniepsa también mejoraron su ejercicio anterior. Eniepsa lo hizo en 21 millones e Hispanoil, en más de 4.400 millones de pesetas.