Cada año, a la misma hora
La ceremonia de entrega de los premios Nobel 1985 que este año tuvieron una dotación de 1.800.000 coronas (unos 36 millones de pesetas), además de diploma y medalla de oro, se cumplió ayer en la Casa de Conciertos de Estocolmo con la precisión que caracteriza el acontecimiento más importante del año en Suecia.A las 16.25 horas y tras una intervención de la Filarmónica de Estocolmo, comenzó la ceremonia con la entrada de los reyes de Suecia, Carlos Gustavo y Silvia, y los galardonados. El presidente de la fundación Nobel, Sune Bergstrom, pronunció un breve discurso de bienvenida.
La entrega de los premios comenzó con el más joven de los galardonados, el profesor de 42 años Klaus Von Klitzing, del Instituto Max-Planck, de Stuttgart, a quien sus descubrimiento sobre el efecto Hall cuantificado le hicieron acreedor a la distinción.
Tras una intervención musical, recibieron el premio de Química los norteamericanos Herbert A. Hauptman y Jeromea Karle, por sus logros en el desarrollo de los métodos para determinar las estructuras de los cristales.
Correspondió luego a los investigadores Michael S. Brawn y Joseph L. Goldstein, ambos de la universidad de Texas (Estados Unidos) recibir la distinción que premia sus descubrimientos sobre la regulación del metabolismo del colesterol, de gran importancia para el tratamiento de las enfermedades circulatorias.
A los acordes del aria Un bel di vedremo, de Madame Butterfly, de Puccini, y con acentuadas muestras de simpatía, correspondió al escritor francés Claude Simon la recepción por su galardón en literatura, tras ser presentado por el secretario de la academia sueca, Lars Gyllensten.
Franco Modigliani, que trabaja en el instituto de tecnología de Massachussets, recibió el premio en ciencias económicas instituido por el Banco Nacional de Suecia en homenaje a Nobel, por sus análisis sobre el ahorro en los mercados financieros.
Por la noche, 1.200 comensales asistieron al salón azul del ayuntamiento para el gran banquete y baile que culmina cada día de 10 de diciembre en Estocolmo.
Babelia
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