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UNA NUEVA EUROPA

Kohl pide que las negociaciones interalemanas se inicien de inmediato

Enric González

ENVIADO ESPECIALAlemania dio ayer un nuevo paso hacia su unificación. El canciller de la RFA, Helmut Kohl, afirmó su voluntad de que las negociaciones interalemanas comiencen "ahora mismo" entre ambos Parlamentos, para que avancen paralelamente a las conversaciones dos más cuatro (ambas Alemanias y los países vencedores de la II Guerra Mundial, EE UU, URSS, Reino Unido y Francia), en las que deben definirse las características de la gran potencia emergente dentro del esquema de seguridad en Europa. Kohl abrió al día siguiente de las elecciones en la RDA la Conferencia sobre Cooperación Económica en Europa.

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La Conferencia, que transcurrirá en Bonn durante las próximas tres semanas, recoge los apartados incluidos en el segundo cesto de la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE), nacida formalmente en Helsinki (Finlandia) en 1975.Este segundo apartado o cesto -conforme a la jerga utilizada en la CSCE- se ocupa de la economía, la tecnología y el medio ambiente.

La apertura de este foro ha sido inmediatamente aprovechada por los empresarios privados de la RFA para exigir "resultados concretos", especialmente en términos de homogeneización de las legislaciones mercantiles de los países del Este respecto a los occidentales.

Las compañías alemanas desean contar inmediatamente con divisas convertibles y facilidades comerciales al otro lado de lo que fue el telón de acero, para proseguir con la masiva conquista del Este que han iniciado ya en la RDA.

Kohl, en su discurso, hizo mención a que el foro económico de la CSCE -cuya reunión de Bonn es la primera- debe ser "un instrumento eficaz para unir a Europa, garantizando la irreversibilidad de las reformas en los países del Este" y "haciendo con ello más prósperas todas las naciones del continen.

El grueso de la intervención del canciller se refirió, sin embargo, a la cuestión de la seguridad, la incluida en el primer cesto de la CSCE.

Kohl reiteró que la gran Alemania "estará en la OTAN y la CE, quizá con alguna situación transitoria en la zona oriental, mantendrá su renuncia a todo tipo de armas biológicas, nucleares y químicas y se someterá a todos los controles internacionales que sean necesarios".

"De Alemania", dijo, "nunca más brotará la guerra, sino la paz".

Influencia de los bloques

Pero subrayó asimismo que "los dos grandes bloques militares [OTAN y Pacto de Varsovia] deben ver reducida su influencia".

"Cada país", añadió, "ha de contar con una voz independiente en el seno de la CSCE, al margen de las alianzas de que pueda formar parte".

Los bloques, según Kohl, deben ceder terreno "a las relaciones multilaterales".

También tuvo palabras tranquilizadoras para Polonia, crecientemente inquieta ante una hípotética reivindicación alemana de los territorios germanos (parte de Prusia y Silesia) que pasaron a control polaco tras la hecatombe nazi.

"Pronto, los Parlamentos de la RFA y la RDA emitirán un comunicado conjunto", similar al ya aprobado por el Bundestag germano occidental, "en el que se consagrará la inviolabilidad de las fronteras con Polonia" declaró.

Propuso asimismo que tal comunicado constituya "la base de un futuro tratado bilateral entre Alemania y Polonia", países que "deben reconciliarse para siempre como lo han hecho ya Alemania y Francia".

El canciller federal dio por supuesto que las negociaciones para la unificación estarán listas el próximo otoño, tanto las internas entre la República Federal de Alemania y la República Democrática Alemana, como las ya iniciadas con las cuatro potencias vencedoras en la última gran guerra, que detentan aún buena parte de la soberanía sobre los dos Estados alemanes.

Para fin de año, según el canciller Kohl, debería reunirse la cumbre de jefes de Estado de la Conferencia sobre la Seguridad y Cooperación en Europa CSCE -todos los europeos menos Albania, y Estados Unidos más Canadá-, propuesta ya por el presidente soviético Mijaíl Gorbachov, con la finalidad de bendecir la gran Alemania y "el nuevo orden europeo, ajeno tanto a los viejos nacionalismos como a la división en bloques", añadió el jefe del gobierno de la República Federal.

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