La policía encuentra cientos de joyas cuando perseguía al autor de unos disparos

La policía ha encontrado cientos de joyas en una casa del barrio de San Fermín cuando estaba tras los pasos de Julián Sanz Carceller, de 32 años, por considerarle presunto autor de los disparos que causaron heridas muy graves a Francisco Almagro Vilches, de 22 años. En la vivienda, propiedad de unos quinquis emparentados con el buscado, se halló un tesoro cuyo valor se estima en 50 millones.

El 18 de julio del año pasado, Julián Sanz Carceller discutió con Francisco Almagro porque este se negó a arreglarle el coche. Sanz esperó al mecánico en la puerta de su domicilio, sito en la calle de Cueva Baja, y le hirió de dos disparos en el abdomen y en una pierna.Agentes de la comisaría de Usera se encargaron de capturar al agresor, que estaba en paradero desconocido. En el curso de las investigaciones, los policías supieron que el sospechoso era yerno del matrimonio quinqui compuesto por Francisco Seijas Benítez, de 56 años, y Catalina Tevar Jiménez, de 53, residentes en un piso del número 6 de la calle de la Mezquita, en el barrio de San Fermín.

La policía estableció alrededor de la finca una permanente vigilancia, lo que permitió comprobar que a la misma acudían numerosas personas de mediana edad. Aunque éstas no tenían aspecto de drogadictos o delincuentes, los agentes intuyeron que en la casa había algún negocio raro, por lo que el pasado martes decidieron entrar en la casa con el correspondiente mandamiento judicial.

Atracos a representantes

Los funcionarios se sorprendieron cuando encontraron en la casa una caja fuerte donde había cinco millones de pesetas en metálico y miles de piezas de oro (relojes Rolex, gargantillas, anillos, cadenas, muestrarios completos, etcétera). El valor del tesoro se estima en 50 millones de pesetas. Según las primeras pesquisas, gran parte de la mercancía puede proceder de atracos a representantes de orfebrería, hurtos por el procedimiento del descuido y robos en domicilios particulares. La práctica totalidad de las joyas son nuevas y limpias de marcas o grabados.

Catalina ha declarado que ella llevaba el negocio de la compraventa de joyas a espaldas de Francisco, su esposo, y de su hijo, Manuel Seijas, de 26 anos, ya que estos dos últimos son adictos a la heroína, en cuya adquisición gastan grandes sumas. No obstante, han sido detenidos los tres.

También ha sido capturado Julián Sanz Carceller, casado con una hija del matrimonio Seijas, acusado del homicidio frustrado del mecánico Francisco Almagro. Fue localizado en un piso de la avenida de Abrantes, en Carabanchel.