_
_
_
_
Crítica:ROCK
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

A lo segundo

En primer lugar actuó Killing Joke, un grupo histórico. Corren tiempos de incomprensión para esta banda inglesa. Surgida en plena resaca punki, la Broma Asesina fue pionera en el ruidismo, y, donde sólo había guitarras distorsionadas, Killing Joke colocó la tímbrica futurista de unos sintetizadores que hoy suenan de primerísima generación.Su concepto del no-género musical, absolutamente punki, les ha llevado a pretender intensidad mediante la velocidad percusiva, las guitarras saturadas y el etismo de la voz. Sin embargo, su recital tuvo un momento mágico. Killing Joke interpretó Love like blood, aquel extraño tiempo medio, rico en tonalidades, triste e inquietante que sobrevive como diamante pulido de un sector de la generación de los ochenta, que no quiso tener pasado, tradición, raíz musical. Curiosamente, aunque 10 años más tarde, los mismos planteamientos parecen animar a la creación a la banda que actuó en segundo lugar: los esperados y bien amados por el público, los bostonianos Pixies.

Killing Joke / Pixies

Pixies: Black Francis (voz y guitarra), Joey Santiago (guitarra), Kim Deal (bajo) y David Lovering (batería). 3.000 personas. Precio: 2.500 pesetas. Pabellón de Deportes del Real Madrid. Madrid, 11 de junio.

Acústicos

El grupo cuenta con cuatro elepés publicados en España, y Surfer rosa, el segundo de ellos -editado en 1988-, provocó la atención internacional hacia un grupo que bajo la velocidad del hard-core (el otro gran no-género), escondía complejas arquitecturas tonales e inquietantes melodías a dúo que conjugaban la entonación exacta con el grito desgarrado. Los Pixies parecían componer con la decisión del que otea entre los trastes de su guitarra en busca de la diferencia. Y ésta llegó, en forma de canciones ocurrentes y con una tímbrica que favorece lo acústico.Una tarea "bieeen difísil, pues", que diría el cantante Black Francis, residente en Puerto Rico durante una temporada. Desaparecida la sorpresa inicial, los temas de los Pixies se escuchan con la atención selectiva que precisa la lectura de un relato. Siempre complejos armónicamente, los desarrollos instrumentales empalagan por su densidad allí donde la rítmica se dispara hacia el hard-core. En los tiempos medios, los Pixies les demuestran un sentido de la contención sobre su propio discurso musical que les hace ganar en profundidad y en sugerencias.

En cualquier caso, no fue posible escuchar al grupo en las condiciones que su ruidismo cristalino requiere. Por obra y gracia del pabellón de marras, los Pixies se vieron despojados de las inflexiones quebradizas en las voces y de la solemnidad de sus guitarras hirientes. Lo cual, unido a cierta reiteración atosigante en sus formas de composición, hizo recordar la frase del castizo que, a principios del verano, se baña en un río de aguas frías y exclama: "A lo primero te da impresión; pero a lo segundo...".

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_