La mitad de los talleres madrileños no tienen los papeles en regla
Fallan los papeles, no las reparaciones. El Ayuntamiento de Madrid ha puesto firmes a los talleres mecánicos con una campaña de control que ha detectado, más que negligencia en el servicio, infracciones de tipo administrativo. Sin embargo, el dato más llamativo es que más de la mitad de los establecimientos inspeccionados se saltan alguna norma. La ausencia de hojas de reclamaciones, de información visible para el cliente y de distintivos en la fachada son las faltas más frecuentes. La inspección municipal, que se inició en junio, proseguirá en otoño.La inspección, realizada por la Dirección de Consumo de la Concejalía de Salud Pública, ha provocado el levantamiento de 137 actas, de entre un total de 251 talleres inspeccionados. De la investigación municipal se desprende que un 54,6% no tiene los papeles en regla. La infracción más común de las detectadas por el consistorio es la carencia de hojas de reclamaciones, que afecta a un 30,7% de los garajes visitados.
El responsable municipal de esta iniciativa, el concejal de Salud Pública, Simón Viñals, explicó ayer que "los servicios prestados en los talleres de reparación de automóviles y la importancia económica de las cantidades que facturan hacen imprescindible el control del sector". El concejal destacó también la repercusión que la labor de los talleres tiene sobre la seguridad de los consumidores y usuarios.
Teresa Rivas, portavoz de la Federación Española de Asociaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (FEACU), con 320.000 afiliados, calificó los datos municipales de poco sorprendentes: "Es uno de los sectores de los que más quejas recibimos, en especial en el apartado referido a presupuestos. Muchas denuncias aluden a presupuestos firmados en blanco. Es importante evitar que esto suceda".
La campaña municipal de control de talleres de reparación de automóviles concluye que un 15,8% no exhibe claramente la información que están obligados a proporcionar al cliente.
PASA A LA PÁGINA 3
Consumo insta a los clientes de los talleres a luchar por sus derechos
VIENE DE LA PÁGINA 1Los talleres mecánicos están obligados por ley a exhibir, en lugar bien visible para el cliente, la siguiente información: precio por hora de trabajo; precio por servicios extraordinarios (fuera de la jornada normal o la utilización de grúa); gastos de estancia diaria del vehículo en el taller; potestad del usuario para exigir presupuesto previo por escrito; garantía de las reparaciones efectuadas por tres meses; tenencia de hojas de reclamaciones; factura escrita, firmada, sellada y debidamente desglosada, y horario de atención al público.
Los establecimientos de reparación de automóviles están obligados también por la legislación vigente a entregar al cliente un resguardo en el momento en que su vehículo ingresa en el taller, pero un 8,8% de los locales revisados incumple esta norma, según la inspección realizada por técnicos de la Dirección de Consumo del Ayuntamiento. Además, el 7,6% no luce en la fachada la placa-distintivo que les acredita para desempeñar su actividad y que están obligados a presentar.
Desacuerdo con el taller
Tras la inspección realizada, el Ayuntamiento de Madrid recomienda a los clientes que exijan el cumplimiento de sus derechos en caso de desacuerdo con el taller, e insta a exigir presupuestos por escrito, garantía de las reparaciones efectuadas y la presentación de hojas de reclamaciones, si fuera necesario.
"El resultado de la campaña no nos llama especialmente la atención", aseguró Teresa Rivas, portavoz de FEACU -única asociación de consumidores con la que contactó este periódico ayer-, tras conocer el informe. La portavoz de FEACU cree que el alto número de irregularidades detectadas no constituye ninguna sorpresa, "porque", añadió, "recibimos numerosas quejas referentes a talleres de automóviles". Rivas coincide con el municipio en alertar a los consumidor es sobre la conveniencia de no aceptar presupuestos en blanco y de exigir la entrega del resguardo para poder demostrar que el coche entró en el taller.
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