El Valencia defrauda de nuevo en un final de locura
Fue un partido de chiste. Para que los aficionados acabaran esquizofrénicos. Cuando su equipo ni se asomaba al área rival, llegó un penalti a Salenko en el último minuto, que aparentemente le. concedía el encuentro. Pero, no. Se alargó el partido y se señaló un nuevo penalti, esta vez en la portería local. Resultado: empate y nueva frustación. En toda la segunda mitad apenas existió el fútbol, y en dos minutos se puso patas arriba Mestalla. El partido de ayer no lo entendió nadie. Fue una buena primera parte del Valencia, una segunda pésima y un final de locura.
Y eso que el choque empezó con normalidad. Cuando saltan delanteros al césped, las probabilidades de gol aumentan. Unaley del fútbol que olvidó Parreira en los dos últimos encuentros y lo recordó ayer para colocar' una pareja inédita hasta el momento: Penev y Salenko. Por ahí desequilibró el Valencia la primera media horade juego. El Albacete descubrió sus intenciones antes de comenzar el partido. Sus jugadores se plantaron formando una especie de embudo en el que Andonov, solo en punta, dibujaba el pico. De nada le sirvió, pues los locales practicaron su mejor fútbol desde la llegada de Parreira. Creaban ocasiones con naturalidad.
A falta de Mazinho, Roberto, a sus 32 años y tras superar una grave lesión, impuso su estilo físico en la medular. Su presencia fue abrumadora, sobre todo en el juego aéreo, por donde llegó el Primer gol, aunque posiblemente precedido por una falta al meta Balaguer. Para la creación estaba ya Fernando y una novedad determinante: la inclusión de Eloy de interior izquierda. Su entendimiento con Penev proporcionó al búlgaro su mejor noche desde su recuperación. Y ésta fue la otra noticia agradable para Parreira. Penev ha vuelto al fútbol. Su progresión física es evidente y su calidad nunca pasó al olvido. Empieza a intimidar a los defensas. También a los árbitros. Todo el estadio sospechaba que Andújar Oliver amonestaría a Penev. Siempre lo hace. Se repelen. Esta vez Oliver sólo se contuvo 15 minutos.
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