Bélgica dice que el presunto etarra Pagoaga puede salir del país

El presunto etarra Enrique Pagoaga Gallastegui que ha pedido asilo político en Bélgica, puede abandonar ese país cuando lo desee, pero no puede entrar en él hasta que su demanda de asilo sea admitida a trámite, según fuentes del Ministerio del Interior belga. Pagoaga, hermano del dirigente histórico José Manuel Pagoaga, Peixoto, está recluido, pero no detenido, en un centro de tránsito del aeropuerto de Bruselas.Pagoaga pidió asilo nada más llegar el pasado domingo a Bruselas, por lo que la ley belga le impide entrar en el país hasta que la administración se pronuncie sobre su petición. El presunto etarra, que llegó con documentación en regla, sí puede abandonar Bélgica, al menos mientras no haya una petición de detención y de extradición de España.

En una primera instancia, la petición de asilo debe ser decidida por la Oficina de los Extranjeros, dependiente de Interior. La oficina dispone de dos meses para pronunciarse, aunque un portavoz del Ministerio del Interior señaló que la decisión se tomará con rapidez. Si es positiva, Pagoaga obtendrá asilo, lo cual generaría un nuevo contencióso entre España y Bélgica. Si la petición es denegada, podrá interponer recurso ante el Comisario para los Refugiados Políticos, Marc Bossuyt.

Bossuyt aceptó a trámite en 1993 una petición de asilo de los presuntos colaboradores de ETA Raquel Arranz y Luis Moreno Ramajo. Tras ello, se abrió las puertas a un largo proceso legal que aún no ha terminado. Ni Arranz ni Moreno están buscados por delitos de sangre, y la extradición ha sido hasta ahora denegada a España porque en la legislación belga no existe el delito de pertenencia a banda armada. Pagoaga, en cambio, fue detenido en 1976 e ingresó en prisión, acusado del asesinato de Emilio Guezala Aramburu.

Pagoaga llegó a Bruselas presumiblemente desde Venezuela, en donde estaba deportado desde 1989, tras romperse las conversaciones de Argel entre ETA y el Gobierno.

Por otra parte, el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, tiene previsto pedir a su homólogo francés, Jean Louis Debré, que facilite la entrega del presunto etarra Luis Iruretagoyena Lanz, que el 8 de junio acaba de cumplir condena en Francia. Oreja aprovechará un encuentro con Debré el próximo lunes en París.

Iruretagoyena fue detenido en 1992, junto con Miguel Gil Cervera, por su presunta relación con una fábrica de explosivos de ETA en París. Actualmente no pesa sobre él ninguna reclamación judicial ni policial española, por lo que Madrid desea que el Gobierno francés le expulse y facilite su captura por España.

Es probable que Mayor también hable con Debré sobre Estanislao Villanueva Herrera, Txapu, un destacado dirigente de ETA que el próximo agosto acaba condena en Francia. El Juzgado de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional tiene emitida contra él una orden de busca y captura, lo que puede acarrear problemas legales similares a los que suscitó la entrega de José Antonio Urnikoetxea, Josu Ternera, el pasado mayo.

El secretario de Estado de Seguridad, Ricardo Martí Fluxá, aseguró ayer que "la cooperación antiterrorista entre España y Francia va por buen camino" y que se incrementará. A cambio, España está dispuesta a facilitar a Francia apoyo e información sobre grupos terroristas islámicos mediante una fórmula todavía no concretada.