Sainz pierde después de chocar con una oveja

Por culpa de una oveja, Carlos Sainz no pudo culminar una operación perfecta en el Rally de Nueva Zelanda. Apenas comenzada la etapa decisiva de la prueba, el Ford Escort del piloto español atropelló al animal a más de 180 kilómetros por hora y ese incidente le costó a Sainz su segunda victoria de la temporada y cuatro puntos importantes para el Mundial. Aun así, acabó segundo, a apenas 13 segundos del sueco Kenneth Eriksson (Subaru), vencedor de la carrera, y recupera terreno en el campeonato del mundo, en el que también se coloca segundo, a ocho puntos del líder, el finlandés Tommi Makinen (Mitsubishi), que no puntuó en Nueva Zelanda.El de ayer fue el segundo episodio desafortunado de Sainz con animales este año. Antes, en el Rally Safari, tuvo que abandonar por culpa de un impala. En esta ocasión, el accidente de Nueva Zelanda apartó al piloto madrileño de una victoria casi segura y le supuso perder una estupenda oportunidad de acercarse al liderato del Mundial. En cualquier caso, tras su segunda posición en los antípodas, Sainz vuelve a contar con posibilidades de pelear por su tercera corona. Hace dos carreras, antes de su triunfo en Grecia, estaba a 16 puntos de Makinen y ahora, cuando faltan cinco rallies para el final del campeonato, se encuentra a sólo ocho.

El incidente

"Es increíble lo que nos ha pasado esta vez", se lamentó Sainz, "aunque hay que estar satisfechos por el trabajo del equipo y por el rendimiento del coche". La única avería en todo el rally fue el problema con los frenos provocado por el choque con la oveja, que le hizo perder medio minuto y su opción al triunfo. El accidente se produjo en el primer tramo de la última etapa, cuando se habían disputado apenas seis kilómetros. "Fue imposible esquivarla, circulábamos a 181 kilómetros por hora y nos la encontramos en medio de la pista", explicó Sainz.Después del incidente, el piloto madrileño retrocedió a la tercera posición de la general, por detrás de Eriksson y de su compañero Juha Kankkunen. La distancia respecto al sueco era casi insuperable y quedaba muy poco terreno por recorrer, pero una vez reparados los desperfectos causados por el choque con la oveja, Sainz se lanzó a intentar recuperar tiempo. Fue el más rápido en los últimos cinco tramos cronometrados del rally, superó a su compañero de escudería, pero no fue suficiente para llegar al liderato. Al final, Eriksson se impuso sólo por 13 segundos.

Sin embargo, el vencedor del Rally de Nueva Zelanda -su segundo triunfo de la temporada- no es enemigo de Sainz en la lucha por el título. La batalla en las últimas cinco carreras del año (Finlandia, Indonesia, San Remo, Australia y RAC Rally) la dirimirá frente al finlandés Makinen y al escocés Colin McRae (Subaru). Ninguno de ellos puntuó en Nueva Zelanda, pero resultaron beneficiados por el resultado registrado ayer, pues hubieran podido ceder cuatro puntos más al piloto español.

"Volvemos a estar vivos en el Mundial y eso es lo más importante", comentó Sainz ayer. La clasificación del campeonato está ahora muy apretada, con Makinen como líder, el bicampeón español a ocho puntos y McRae a 10. La próxima cita es en Finlandia, en un terreno bastante parecido al de Nueva Zelanda, del 29 de agosto al 1 de septiembre. Sainz y su compañero Kankkunen realizarán la semana que viene unas jornadas de ensayos en el país nórdico.

Por otra parte, Oriol Gómez (Seat) consiguió la victoria en la categoría F-2, en la que participan coches sin motor turbo y con dos ruedas motrices. La marca española domina el Mundial de esta categoría.