La Fundación Botín restaura y monta la colección de esculturas del Prado

El Museo del Prado y la Fundación Marcelino Botín firmaron ayer un convenio para la remodelación y actualización de la sección de esculturas del Prado. El presupuesto total del convenio es de 79,5 millones de pesetas en un plazo de tres años, según el texto firmado por José Antonio Fernández Ordóñez y Emilio Botín, presidentes de los dos patronatos, en presencia de la ministra de Educación y Cultura, Esperanza Aguirre; el secretario de Estado de Cultura, Miguel Ángel Cortés, y el director del museo, Fernando Checa.

El convenio incluye la restauración de 13 esculturas en piedra, a lo largo de tres campañas, por el restaurador Silvano Bertolin; la publicación de dos catálogos de escultura y una guía de la colección del Prado, a cargo de los especialistas S. Schröder y R. Coppel; la convocatoria de dos becas de formación en restauración en mármol, bajo la dirección de Bertolin, y el diseño de pedestales, en mármol o piedra, iluminación y señalización de las salas de escultura.

Los espacios dedicados a escultura clásica se han instalado en las salas situadas en la entrada de Murillo -en nuevos ámbitos y en los que ocupaban las pinturas negras de Goya-, donde se exponen, hasta el 15 de febrero, las piezas de la colección de Cristina de Suecia. Hasta el año 2000 se irán incorporando las 450 esculturas catalogadas, entre clásicas y renacentistas. Según el plan museográfico, es posible que se ocupe también la actual cafetería y la sala del Tesoro del Delfín.

La ministra Aguirre calificó la firma del convenio de "acontecimiento trascendente" para una de las "primeras instituciones del mundo entero". "La Fundación Botín cumple una labor de auténtico mecenazgo, labor que es de importancia capital para la salud de nuestra vida cultural y que constituye parte fundamental de la política del ministerio". También señaló que la conservación del patrimonio "no puede ser obra exclusiva del Estado".

Emilio Botín destacó la "gran labor" del ministerio y la colaboración entre las entidades públicas y privadas. Para Fernández Ordoñez, junto con el convenio firmado, que sirve para cumplir los objetivos del museo de conservar y exponer sus fondos, 1998 será para el Prado el año de la exposición de Felipe II, las obras de la cubierta y del Casón y la ampliación arquitectónica hacia los Jerónimos.