Telefónica se convierte en el mayor operador de Brasil

Telefónica se convirtió ayer en el primer operador de Brasil. El consorcio que encabezaba se hizo con la parte más codiciada de la privatización de Telebras, las compañías de telefonía fija de São Paulo y de móviles de Río de Janeiro. La compra del 19,12% que poseía el Estado conlleva, además, la gestión de ambas. Sólo en Sâo Paulo, 6,7 millones de personas están en lista de espera para conseguir un teléfono. El consorcio, del que forman parte también el BBV, la eléctrica Iberdrola y Portugal Telecom, deberá pagar 927.044 millones de pesetas. Telefónica tenía dispuestos 427.000 millones, procedentes de la ampliación de capital de febrero. La compañía española tiene desde ayer más líneas en América, 17 millones, que en España, donde sólo son 16 millones.

Telefónica se adjudicó en la subasta de Telebras (el sistema telefónico de Brasil) dos de las compañías más apetecidas del monopolio brasileño. Telebras, considerada la mayor compañía del sector en América Latina, se había dividido en 12 partes para su privatización.La empresa española, que ha estado asesorada en el proceso por el banco de inversiones Lehman Brothers, logró hacerse con el control de Telesp, la empresa de telefonía fija del Estado de São Paulo (33 millones de habitantes, 15 en la capital), que tiene 5,42 millones de líneas instaladas y una lista de espera aún más numerosa. Se hizo también con la empresa de telefonía móvil de los Estados de Río de Janeiro y de Espiritu Santo (16 millones de habitantes).

Además, un consorcio encabezado por Iberdrola (62%9 y participado por Telefónica (38%), se adjudicó la telefonía móvil en los Estados de Bahía y Sergipe (14 millones de habitantes), Tele Leste Celular, con 211.673 abonados.

El Estado brasileño ha ingresado el equivalente a 2,8 billones de pesetas con la venta del 19,12% del capital que tenía en las 12 compañías resultantes de Telebras, una de larga distancia, tres de telefonía fija y ocho de móviles.

El consorcio encabezado por Telefónica consiguió adjudicarse Telesp por 5,783 billones de reales (unos 749.744 millones de pesetas), un 63,28% por encima del precio mínimo fijado, unos 459.000 millones de pesetas. Los socios de Telefónica en el grupo Tele Brasil Sul Participaciones son Iberdrola y BBV, Rede Brasil Sul (RBS) y Portugal Telecom.

La "joya de la corona"

Telefónica consiguió la joya de la corona en una subasta en la que sólo participaron dos consorcios, el español y el encabezado por Telecom Italia, que ofreció cerca de 515.000 millones de pesetas. La favorita para adjudicarse Telesp era BellSouth, que en la noche del martes desistió. La retirada de la compañía estadounidense estropeó, en buena medida, los planes del Gobierno brasileño, que en una puja más reñida esperaba ingresar hasta 1,20 billones de pesetas.Telesp, que opera en un Estado que aporta un 34% del total al producto nacional bruto de Brasil y es el más poblado del país, está considerada como la tercera mayor empresa de telecomunicaciones de América Latina y representa un tercio de la telefonía fija en el mercado brasileño. Tras la adjudicación a Telefónica, Telesp subió un 4,1% en Bolsa.

El tamaño del mercado telefónico en São Paulo, con cerca de siete millones de personas en la lista de espera, le confiere un enorme valor. El año pasado, la compañía, con 23.000 trabajadores, obtuvo unos beneficios cercanos a 140.000 millones de pesetas.

Telefónica también se adjudicó la empresa de móviles Tele Sudeste Celular, tras ofrecer 177.300 millones de pesetas, un 138,59% más del precio mínimo.

El consorcio que se hizo con Tele Sudeste Celular está encabezado por Telefónica e integrado por Iberdrola y las japonesas NTT, la mayor compañía de telecomunicaciones del mundo por ingresos, e Itochu. Tele Sudeste Celular (598.000 abonados), es una de las tres empresas de telefonía móvil con mayor mercado del país.

El presidente de Telefónica, Juan Villalonga, afirmó que con la compra de la Telefónica de São Paulo, "la empresa española confirma su liderazgo en América Latina". Telefónica fue la primera empresa extranjera en entrar en las telecomunicaciones brasileñas, con la compra parcial en 1996 de la Compañia Riograndense de Telecomunicaciones (CRT). En cumplimiento de la legislación antimonopolio, ahora deberá dejar el control de CRT y diluir su participación entre sus socios.

Villalonga celebró el triunfo de su aliada en el mercado internacional, la estadounidense MCI, en la subasta de Embratel, la única operadora de larga distancia de Brasil, cuyo control se adjudicó por 339.000 millones de pesetas, y el de Portugal Telecom, que se hizo por 468.000 millones de pesetas con la compañía de móviles de São Paulo. Telefónica mantiene una alianza con MCI para inversiones en América y una participación del 3,5% en Portugal Telecom.

El gobierno brasileño ha conseguido privatizar Telebras después de que fracasarán centenares de demandas promovidas por los sindicatos y los partidos de la oposición, y en un clima de gran tensión en las calles de Río de Janeiro, en cuya Bolsa se celebraron las pujas. Más de 3.000 policías intentaron contener a los miles de manifestantes convocadas por los sindicatos.

La privatización de las 12 compañías telefónicas ha sido uno de los mayores negocios de este fin de siglo. El Gobierno ha conseguido recaudar 2,8 billones de pesetas, un 63,74% por encima del precio mínimo fijado.

Fuerte competencia

Algunas de las mayores empresas de telecomunicaciones del mundo, canadienses, estadounidenses, europeas y la japonesa NTT, compitieron en la subasta. Al margen de las citadas, las empresas de telefonía fija se repartieron de la siguiente manera: Tele Centro Sul se vendió por 270.000 millones de pesetas, un 6,15% más del precio mínimo, al consorcio encabezado por Telecom Italia y el banco brasileño Opportunity, y Tele Norte Leste fue vendida por 447.900, un 1% más que el precio mínimo, al consorcio brasileño Gutierrez Andrade e Inepar. Por la operadora de larga distancia Embratel MCI pagó 339.999 millones, con una prima del 47,22% sobre el mínimo.En cuanto a las empresas de móviles, Telesp Celular fue vendida a Portugal Telecom por 468.000 millones,, un 226,28% por encima del mínimo; Telemig Celular se vendió por 97.758 millones , un 228,70% del valor mínimo, al consorcio encabezado por la canadiense Telesystem y el grupo brasileño Opportunity; Tele Celular Sul se vendió por 90.300 millones, un 204, 35% más del valor mínimo, a un consorcio integrado por los grupos brasileños O" Globo, Bradesco y Telecom Italia.

Las cuatro empresas de telefonía móvil que operan en el norte del país y que se consideran menos atrayentes se las adjudicaron UGB/Italia Telecom, Iberdrola, la operadora estadounidense Bell South y la canadiense Telesystem junto al grupo brasileño Opportunity.

El Gobierno dividió las empresas en tres bloques para la subasta, que duró cuatro horas, una hora y medio menos de lo previsto. El primer bloque subastado fue el de las empresas de telefonía fija y Embratel. El segundo bloque el de las empresas de telefonía celular de los Estados más ricos, y el tercero, las de móviles menos atrayentes.

La vuelta de la telefonía a la iniciativa privada, después de 26 años de control e inversión estatal, revolucionará la infraestructura del país. Los datos estimativos apuntan que las empresas de telecomunicaciones invertirán grandes cantidades en la mejora del sistema en los próximos 10 años.

Según el ministro de comunicación, Luiz Carlos Mendoza de Barros, el número de teléfonos instalados en el país pasará de los 18 millones que hay actualmente a 33,4 millones en el 2001 y a 50 millones en el 2007. Además, las tarifas de telefonía deberán caer hasta el 2005 entre un 13% y un 18%, dependiendo del tipo de consumidor.

Precios excesivos en Europa