Las tabacaleras de EE UU recusan al juez de Miami por ser ex fumador
Las tabacaleras de EE UU (Philip Morris, Reynolds, Lorillard y el Tobacco Institute, entre otras) recusaron ayer al juez que hace dos meses presidió el histórico juicio en el que fueron declaradas culpables de "ocultar los peligros de fumar y de manipular los niveles de nicotina". Los abogados de la industria del tabaco sostienen que como el juez Robert Kaye fue fumador, y podría beneficiarse de una indemnización, puede tener prejuicios a favor de los 500.000 fumadores de Florida en cuyo nombre se interpuso la demanda colectiva.En la vista que se celebró por este motivo en el Tribunal estatal de Miami, el juez Stuart Simons no quiso pronunciarse sobre la recusación, y trasladó cualquier decisión al propio juez Kaye, que deberá decidir si se inhibe o si sigue con la causa, tal y como fija la ley procesal estadounidense.
La moción de recusación es parte de la estrategia legal de las tabacaleras para la segunda fase del juicio, que está previsto comience el próximo martes, en la que el mismo jurado que actuó en la primera parte deberá decidir ahora la suma de la indemnización por daños y perjuicios a los fumadores enfermos y a las familias de quienes murieron a causa del tabaco. Si la recusación es aceptada, legalmente no invalidará legalmente el veredicto previo de culpabilidad pero prácticamente equivaldría a un nuevo juicio, ya que el nuevo juez que se hiciera cargo tendría que revisar los cerca de 40.000 documentos del caso.
El retraso de meses que eso implicaría podría, por otra parte, forzar la selección de un nuevo jurado que, igual que el magistrado, tendría que ver todas las pruebas y escuchar todos los testimonios. El jurado de la primera fase, compuesto por seis ciudadanos y otros siete alternos, lleva casi un año secuestrado en este caso, apartado de sus obligaciones laborales y personales.
Indemnizaciones
Con este caso, el primero en el que los demandantes son los propios fumadores, la industra del tabaco se enfrenta a indemnizaciones millonarias de consecuencias ruinosas.
Inicialmente, los abogados solicitaron 200.000 millones de dólares de indemnización (unos 32 billones de pesetas), pero, dado el número de fumadores enfermos que podrían reclamar una parte del dinero, la cifra final podría sobrepasar los 500.000 millones de dólares (unos 80 billones de pesetas) sólo en el estado de Florida.
La recusación de ayer es la segunda vía legal que intentan las tabacaleras para que el juez abandone el caso. Primero le pidieron al propio magistrado que se inhibiera y cuando éste se negó presentaron una apelación ante el Tercer Tribunal de Apelaciones del Distrito, que también falló en su contra.
Hace semanas han vuelto a activar la apelación en última instancia ante todos los jueces del mismo tribunal. Ésta todavía no se ha resuelto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.