El último líder de la RDA volverá a ser juzgado por los tiros de los guardafronteras

El último líder comunista de la República Democrática Alemana (RDA), Egon Krenz, de 62 años, puede ser condenado a una pena de hasta 11 años de prisión por homicidio coincidiendo con el décimo aniversario de la apertura del muro de Berlín. Krenz, el hombre que sustituyó a Erich Honecker al frente del SED (el partido de los comunistas de la RDA) en el otoño de 1989, compareció ayer ante un tribunal de apelación en Leipzig. Este tribunal decidirá el 8 de noviembre, previsiblemente, si absuelve al dirigente o endurece una anterior condena por homicidio contra el comunista que durante varias semanas fue contemplado como el equivalente de Mijaíl Gorbachov en la RDA. En 1997, Krenz fue condenado a una pena de seis años y medio de cárcel en base a su responsabilidad ideológica por los disparos de los guardafronteras de la RDA sobre quienes intentaban huir a Occidente.

Al abrirse el muro de Berlín el 9 de noviembre de 1989, Krenz, que había sustituido a Honecker pocos días antes al frente del SED, concentraba en su persona los cargos de secretario general del partido, presidente del Consejo de Estado y del Consejo de Defensa y tenía, por tanto, el máximo poder político y militar en la RDA. Los procesos a los altos dirigentes de la RDA han sido objeto de múltiples controversias, porque juzgan con carácter retroactivo y con legislación de la República Federal Alemana sobre las responsabilidades contraídas en el marco legal de la RDA.

A Krenz se le responsabiliza políticamente de la muerte de cuatro personas que intentaban huir de la RDA. Oficialmente, 263 personas perecieron cuando trataban de huir del país.