Pujol exige a Telefónica que lleve a toda Cataluña los servicios de banda ancha

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, reclamó ayer al presidente de Telefónica, César Alierta, que cumpla con su compromiso de cubrir la totalidad del territorio de Cataluña con sus servicios de comunicaciones de banda ancha. Tras la reunión celebrada entre ambos en el Palau de la Generalitat, fuentes de Telefónica señalaron: "La presión viene por la cobertura del servicio, y no por el tipo de tecnología que se utilice". La opción de Telefónica es el ADSL, en lugar de invertir en una infraestructura de telecomunicaciones por cable.

De "encuentro de cortesía" calificaron ambas partes la entrevista celebrada ayer entre Alierta y Pujol. No era la primera vez que ambos se entrevistaban tras la salida de Juan Villalonga de la presidencia de Telefónica, ya que había habido un primer contacto rodeado del mayor de los sigilos. Pero sí fue la primera reunión después de que la operadora se comprometiera este otoño ante el Gobierno catalán a llevar los servicios de comunicación de banda ancha al 92% de la población en el plazo de un año, mediante la tecnología ADSL.Esta tecnología, que supone aprovechar las infraestructuras de fibra óptica y de telefonía convencional para ofrecer una conexión a Internet a gran velocidad, implicará para Telefónica unas inversiones de 50.000 millones de pesetas.

La Generalitat no había ocultado previamente su malestar porque opinaba que Telefónica no sacaba partido a sus infraestructuras en Cataluña. Sobre todo, a los 380.000 kilómetros de fibra óptica.

El acuerdo con la Generalitat, suscrito por el consorcio de ayuntamientos Localret, prevé también que la fibra óptica llegue al 95% de la población antes del año 2002.

El desarrollo de infraestructuras centró la entrevista de ayer, que duró cerca de tres cuartos de hora, según informaron tanto la Generalitat como Telefónica. En la reunión estuvieron presentes el consejero de Presidencia, Joaquim Triadú, y el de Universidades, Investigación y Sociedad de la Información, Andreu Mas-Colell.

La "presión" de Pujol para que Telefónica cumpla con su compromiso se enmarca en la crisis abierta en los operadores de telecomunicaciones por cable: tanto Menta (Auna) como al-pi telecomunicacions (Uni2) se han quedado sin director general en menos de un mes, lo cual ha sembrado mayores dudas sobre el futuro del cableado de Cataluña, que ya iba con retraso.

Localret, que apuesta por el cable como la "mejor opción, aunque sin ser dogmáticos" para la transmisión de información a gran velocidad, acaba de pedir a la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) que clarifique cuáles son los compromisos de Telefónica respecto del cable.

En la reunión de ayer, que forma parte de la serie de entrevistas que Alierta está manteniendo con los presidentes de varias comunidades autónomas, el presidente de Telefónica formalizó la asunción como propios de los planes de su predecesor Juan Villalonga para Cataluña. Aparte de la citada reactivación de infraestructuras, otros proyectos pasan por la puesta en marcha de, al menos, un centro de alta tecnología dedicado a la investigación, el traslado de la sede de Terra-Lycos a Barcelona -más un centro de desarrollo de contenidos-, ubicar en la ciudad la filial Zeleris, especializada en servicios logísticos para comercio electrónico, y la entrada en la productora Media Park.