Camps y Macià piden tranquilidad a los trabajadores del calzado

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el alcalde de Elche, Diego Macià, pidieron ayer tranquilidad a los trabajadores del sector del calzado e insistieron en que este sector industrial tiene futuro. "El mensaje para esas personas es que se están tomando todas las medidas en un sector que tiene futuro con empresas que aporten un valor añadido al producto", aseguró Macià. El jefe del Consell, horas más tarde, también mostró su inquietud por el futuro de Izar y reclamó una entrevista de los presidentes autonómicos afectados con Rodríguez Zapatero.

El jefe del Consell pide una reunión para hablar de Izar con Rodríguez Zapatero

"El sector del calzado tiene futuro y los trabajadores también lo tienen", manifestó el presidente del Consell, que argumentó que las soluciones están claras y pasan por la formación, la innovación, la recuperación del mercado interior y la entrada en mercados emergentes como el ruso compitiendo con los italianos.

La entrevista del jefe del Consell y del alcalde ilicitano tuvo lugar ayer en el Palau de la Generalitat después de que varias protestas contra el calzado chino -en especial la primera, que acabó con disturbios, varias naves quemadas y más de una docena de detenidos- hayan hecho emerger en Elche el malestar existente en un importante colectivo de trabajadores que ve peligrar sus puestos con productos mucho más baratos.

El presidente popular insistió en que su Administración hará "todo aquello que signifique apoyo a los pequeños y medianos empresarios", que en la Comunidad Valenciana está muy localizado en las comarcas del Vinalopó. Camps insistió en la necesidad de "reconquistar el mercado interior", en el que el 55% de las ventas es de zapatos procedentes de otros países.

Por su parte, el socialista Diego Macià explicó que a los problemas estructurales del sector del calzado se han sumado los coyunturales, aunque en las últimas ferias sectoriales se ha producido un repunte de los pedidos.

Macià indicó que el sector del zapato ha de afrontar un problema de reestructuración con otro coyuntural provocado por la fortaleza del euro, la guerra de Irak, que afecta al mercado americano, y la ralentización de la economía alemana y francesa.

Tanto el presidente como el alcalde insistieron en la necesidad de coordinar las acciones entre las tres Administraciones y el sector, pero recalcaron que los industriales no han de competir en el precio de la mano de obra, sino en la calidad, el servicio, la moda y la marca.

Los dos representantes políticos también reconocieron la necesidad de presionar a la Unión Europea para que evite el dumping social, es decir la competencia de países terceros basada en el coste de una mano de obra que carece de las más mínimas garantías y condiciones laborales.

En este contexto, cerca de veinte empresas, la mayoría ilicitanas, han acudido a la feria de calzado de Moscú, que comenzó ayer y se prolongará hasta el próximo miércoles, en un momento difícil para un sector que durante el primer semestre de este año ha visto descender en un 35% su ventas al exterior.

El director comercial de la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), Javier García Lillo, aseguró ayer a Efe que la dificultad del mercado ruso, que está considerado de gran interés por el tipo de productos que adquiere, afecta fundamentalmente a las empresas que carecen de representante. En su opinión, a pesar del descenso de las ventas, los empresarios entienden que el de Moscú, en particular, y el ruso, en general, son mercados en los que hay que hacer un esfuerzo para estar presentes. Con esta finalidad, la patronal ha elaborado el denominado Plan Rusia, que en una primera fase establecerá las condiciones óptimas de las empresas que pueden tener posibilidades en el mercado ruso, algo difícil dada la implantación del producto italiano, que se identifica con la calidad.

Por otra parte, Camps se entrevistó a última hora de la tarde con la Comisión de municipios en defensa del sector naval. Al acabar el encuentro, el jefe del Consell pidió una entrevista de los presidentes autonómicos afectados con José Luis Rodríguez Zapatero. "Es una cuestión de Estado y, por ello, los presidentes de todas las comunidades autónomas que tenemos empresas de Izar en nuestro territorio tenemos el derecho y la obligación de reclamar una reunión con el presidente del Gobierno para que nos explique por qué desmantelar una industria tan importante para nuestro país". sentenció.