El área protegida donde quiere edificar Torrelodones es intocable

El alcalde de Torrelodones, Carlos Galbeño (PP), lleva casi seis años empeñado en sacar adelante un proyecto urbanístico que convertiría una zona protegida en una macrourbanización de 1.536 viviendas y un campo de golf. Este empeño quedará en sueño, según el informe elaborado por la dirección del parque de la Cuenca Alta del Manzanares, que calificó el proyecto como "ambientalmente inviable".

Los terrenos que Galbeño quería recalificar están en el Área Homogénea Norte (AHN), una zona de 128 hectáreas de alto valor ecológico. Es un bosque de encinas y monte mediterráneo que acoge a más de medio centenar de especies de aves, según un informe de científicos del CSIC. Fuentes conocedoras del proyecto aseguraron ayer que no se llevará a cabo porque prevalecerá el respeto a la naturaleza.

El Ayuntamiento de Torrelodones necesita el visto bueno de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad. Y ese dictamen será previsiblemente negativo, porque recoge las opiniones de la dirección del parque de la Cuenca Alta del Manzanares, de la Dirección de Carreteras, de Patrimonio, del Canal de Isabel II y de la Confederación Hidrográfica del Tajo. Y varias de estas instituciones ya han mostrado sus recelos al plan.

Un portavoz de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio precisó ayer que el informe no es definitivo. "Aún no está visado, ni firmado. Aún no se ha presentado a la Dirección General de Medio Ambiente por lo que aún no es oficial", explicó.La recalificación de los terrenos del AHN provocó una guerra política en el municipio. Los grupos de la oposición (PSOE, Vecinos por Torrelodones, Actúa), asociaciones vecinales y ecologistas se han opuesto férreamente al proyecto. Para sacar adelante este plan urbanístico el alcalde destituyó a dos concejales de su propio partido porque lo cuestionaron y sospechaban de otras decisiones urbanísticas. La zona había sido protegida en mayo de 2003 por el anterior alcalde, Enrique Muñoz, también del PP, quien había declarado estos terrenos como suelo no urbanizable especialmente protegido. Esta calificación suponía un duro revés para los planes de Galbeño y nada más alcanzar la alcaldía, en junio de 2003, comenzó a planificar la recalificación de la zona, situada en el Parque Regional del Guadarrama, junto a la A-6 y el barrio de Los Peñascales.

Galbeño no tardó en comenzar los trámites para desproteger los terrenos con el fin de que pudieran acoger las 1.536 viviendas y un campo de golf. La zona despertaba muchos intereses inmobiliarios. La constructora de la hermana del alcalde, Cimaga, se hizo con terrenos en la zona junto con otras empresas y promotoras que financiaban a una fundación municipal. Finalmente, Galbeño logró, en febrero de 2007, modificar las normas urbanísticas del municipio. Pero antes de comenzar su plan necesitaba el visto bueno de la Comunidad de Madrid, que aún no ha emitido el informe preceptivo.

El retraso se debe al empeño de la oposición, que presentó una moción para revisar el proyecto en el municipio. Esto paralizó el trámite durante unos meses. Pero la mayoría del PP en Torrelodones devolvió enseguida la pelota a Medio Ambiente.

Ahora el Gobierno regional debe emitir un informe de impacto ambiental. Para ello ha solicitado informes a otros organismos dependientes, como la dirección del parque regional de la Cuenca Alta del Manzanares, el Canal de Isabel II, la Confederación Hidrográfica del Tajo... La conclusión técnica de los responsables del parque declara el proyecto inviable. "No nos vamos a pronunciar hasta que veamos el informe", asegura un portavoz municipal, que mostró su sorpresa porque un grupo político tenga acceso a este documento antes que el Ayuntamiento.

La concejal del grupo Vecinos Por Torrelodones, Elena Biurrún, afirmó ayer que, aunque quedan algunos trámites, "la decisión política sólo puede mantener el criterio técnico de los responsables del parque". Y agregó: "Es el fin del camino para el descabellado proyecto del PP". El portavoz socialista en el municipio, Juan Ignacio Bidart, apuntó que "este informe se trata de un serio revés a las intenciones de este equipo de gobierno". Bidart reclamó al Ayuntamiento que retire "de una vez por todas este proyecto".