"Hemos empezado perezosos"

"Estamos muertos", decían los jugadores españoles al salir del estadio Tívoli, con la sonrisa ladeada, señalando las piernas endurecidas por la fatiga. "La semana de doble sesión se ha notado", apuntaban. En la expedición nadie se fue muy conforme al autobús. Tampoco Vicente del Bosque, que, sin embargo, destacó que del partido extraía "más conclusiones positivas que negativas". El seleccionador precisó que de todas las lecturas optimistas la más importante era el estado de forma de Iniesta, uno de esos casos extraordinarios de habilidad para el último pase. "Ha sido un partido testimonial porque no estábamos físicamente al ciento por ciento", comenzó; "lo más destacable es el regreso de Iniesta, que ha jugado a un buen nivel después de mucho tiempo sin poder hacerlo".

"No es por poner una excusa, pero el balón es de playa", comenta Casillas

"Ellos nos han presionado muy arriba, pero quizá ha sido más por deméritos nuestros que por méritos del rival... Hemos empezado perezosos", observó Del Bosque. "Hemos jugado demasiadas veces para atrás y eso, en vez de desahogarnos, nos ha complicado un poco", añadió el seleccionador, que hizo debutar a Pedro y Javi Martínez, y ya van 14.

Iniesta, pálido a pesar del sol de la primavera, se puso bajo los focos de las cámaras y analizó el partido con sentido crítico: "Nos han apretado arriba y no lo esperábamos. Nos ha costado encontrar las líneas de pase y llegar con más claridad. Cuando el equipo lo ha conseguido, nos hemos encontrado más cómodos. Pero ellos han hecho un muy buen partido. Han rifado pocos balones. Son cosas que quizá nos encontremos en Sudáfrica. Hay que aprender".

"El equipo tiene que seguir creciendo y mejorando cosas", prosiguió el jugador del Barça. "Ser favoritos está bien, pero con calma. Cualquiera te puede ganar. España se ha ganado el derecho a estar entre los grandes como Italia, Brasil o Argentina, que en las competiciones importantes siempre están ahí".

Ante las preguntas que cuestionaron el juego de Casillas, que falló en el primer gol de la tarde, el seleccionador procuró apagar cualquier principio de incendio. "No hay ninguna duda", dijo Del Bosque; "es el primer portero porque es indiscutible".

Casillas, que con 103 partidos superó a Raúl con La Roja y solo está por detrás de Zubizarreta (126), vio el vaso medio lleno: "Lo mejor del partido ha sido no tener ningún lesionado. Que lleguemos los 23 en óptimas condiciones a la concentración de los Alpes. Nos ha faltado un poco de todo. Hemos perdido un poquito el ritmo. Ha sido una semana de entrenamiento y de toma de contacto. Es verdad que hemos sufrido un poco más de la cuenta. Pero es lógico y normal. Hacía mucho tiempo que no jugábamos juntos. El último partido fue en febrero, contra Francia". Cuando le preguntaron por el balón oficial del Mundial, empleado ayer durante el partido, Casillas disparó a discreción: "Es un balón de playa. Del balón no sólo nos quejamos los porteros. No es por poner una excusa. Los compañeros de campo se quejan también y nos apoyan".