13 fotosEl campo abre el mercado laboral a los jóvenes inmigrantesDecenas de chavales que no podían trabajar se incorporan a las campañas agrícolasAlbert GarciaPaco PuentesBarcelona - 26 may 2020 - 07:24CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinBlueskyCopiar enlaceUno de los jóvenes marroquíes que participa en la campaña de recogida de frutos rojos, en la localidad onubense de Almonte, gracias al apoyo de la ONG Voluntarios por Otro Mundo.Paco PuentesUna manijera controla la bandeja de frambuesa que recoge otro de los exmenores migrantes para el que esta campaña es su primer trabajo legal en España.Paco PuentesAunque este joven marroquí recoge la frambuesa en tirantes, la mayoría va tapado, pese a los casi 40 grados que se respiran bajo el invernadero, para protegerse de los picotazos de las abejas.Paco PuentesMohamed Kachari y Aiyun El Mouriach, marroquís de 19 años, bromean mientras recogen frambuesa. El trabajo es duro, pero para ellos es su primera oportunidad de inserción sociolaboral.Paco PuentesOtro de los jóvenes amparados por la ONG de Jerez de la Frontera (Cádiz), Voluntarios por Otro Mundo, recoge frambuesa. En una hora termina su jornada laboral de seis horas y media por la que percibe unos 42 euros.Paco PuentesMohammed Gheziel y Mouad Lmadani, dos jóvenes marroquíes que acaban de cumplir 18 años, trabajan en un campo de viñedos de Tarragona.Albert GarciaVarios de los jóvenes migrantes se dirigen a la casa que comparten en El Rocío tras apearse del autobús que les traslada desde los cultivos.Paco PuentesLa vivienda en la aldea de El Rocío (Almonte), donde residen los jóvenes migrantes durante la campaña de recogida de frutos rojos. Algunos esperan continuar después en Lleida, recogiendo fruta de hueso.PAco PuentesEl responsable de la ONG Voluntarios por Otro Mundo, Michel Bustillo, saluda a uno de los chavales que acaba de regresar del campo.Paco PuentesEmeka es un joven nigeriano de 19 años que llegó a España hace dos en patera y que ha encontrado en el campo la oportunidad “de ganar un sueldo que no sea en negro”.Paco PuentesUnos 50 jóvenes marroquíes y subsaharianos conviven en la casa del Rocío. En pleno Ramadán, solo comen y beben cuando se pone el sol.Paco PuentesLos chavales esperan al reparto de lotes de comida que las ONG que les apoyan han llevado hasta El Rocío a través de Bustillo.Paco PuentesEn la vivienda, una casa típica del Rocío, hay una decena de habitaciones con literas de hasta seis camas. También dispone de tres cocinas y varios cuartos de baño distribuidos entre sus tres alturas.Paco Puentes