Las “graves irregularidades” del máster de Cifuentes que los jueces consideran probadas

Más allá de la absolución de Cristina Cifuentes, la sentencia de este lunes desmonta el discurso que mantiene la expresidenta de la Comunidad de Madrid desde que estalló el caso máster. La Audiencia Provincial da por probadas una batería de “graves irregularidades” que tuvieron como beneficiaria a la antigua jefe del Gobierno regional y describe un clima de “temor” sufrido por la profesora que fabricó el acta del trabajo fin de máster (TFM) de la exdirigente del PP.

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Notas cambiadas. Los jueces destacan que Cifuentes aprobó sin hacer nada para merecerlo. Sobre dos asignaturas donde se le puso un notable, el tribunal concluye que la expresidenta “no realizó examen, ni trabajo, ni ninguna otra actuación merecedora de calificación”. En una tercera, donde se le cambió la nota dos años después, afirman que la popular no se presentó a ningún examen por mucho que el profesor que autorizó esa modificación “irregular” dijera en el juicio que sí. Una funcionaria de la universidad, además, accedió sin permiso al sistema interno de la Rey Juan Carlos y le cambió la nota del trabajo fin de máster para que constase como aprobado.

Defensa “inexplicable”. Cuando estalló el escándalo, Cifuentes aseguró que había defendido su TFM ante un tribunal el día que consta en el acta falsa. Pero en el juicio oral se contradijo y expuso que simplemente acudió esa jornada a la universidad y se lo entregó dos o tres personas que no pudo identificar, a los que explicó de forma “informal” las líneas generales de su supuesto trabajo. Sin embargo, los jueces consideran ese hecho “inexplicable”, pues la expresidenta no podía haber presentado ese documento hasta haber aprobado todas las asignaturas y entonces aún figuraba como no presentada en una de ellas.

“Consecuencias negativas”. El fallo incide en que la profesora que falsificó el acta, presionada de forma “insistente y agobiante” por el catedrático Enrique Álvarez Conde y la asesora regional María Teresa Feito, accedió a hacerlo ante “el temor de las posibles consecuencias negativas para su trabajo” que podía sufrir. Según la sentencia, Feito instó a fabricar el documento “a sabiendas de que este no existía”. Esta asesora fue, además, la que acudió a la universidad en 2017 junto a Cifuentes para recoger el diploma acreditativo del máster.

Recursos. La Universidad Rey Juan Carlos, que se encontraba personada como acusación particular y pedía cuatro años de cárcel para la expresidenta, ha decidido no recurrir su absolución. “Respetamos la decisión judicial”, apuntan fuentes del centro docente. La Fiscalía, por su parte, estudia qué hacer.

El PP saca pecho. El PP de Madrid celebró este lunes la absolución de Cristina Cifuentes y la aprovechó para cargar contra la oposición y medios de comunicación, pese a que la resolución judicial considera probado que la expresidenta regional consiguió el título universitario de forma irregular y pese a que condena a dos funcionarias por falsificar el acta del TFM que ella exhibió ante las cámaras para tratar de esquivar el escándalo. El portavoz de los populares en la Asamblea regional, Alfonso Serrano, aseguró que, “en un Estado de derecho, la verdad que prevalece es la verdad judicial”. Además, exigió a “algunos grupos políticos de izquierdas y medios” que, antes de volver a hablar del PP, pidan perdón al partido y a Cifuentes. “Denunciamos el calvario que ha sufrido”, remachó la formación en un tuit.