El Ayuntamiento de Barcelona suspende los premios de antigüedad de sus funcionarios

El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este lunes, en una sesión extraordinaria, suspender los premios de antigüedad a sus funcionarios, modificar la retribución de los trienios a los empleados más veteranos y dotarse de un reglamento que equipare formalmente las condiciones laborales del personal directivo, concejales y eventuales a las del resto de la plantilla. La decisión se toma después de un informe de la ...

El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este lunes, en una sesión extraordinaria, suspender los premios de antigüedad a sus funcionarios, modificar la retribución de los trienios a los empleados más veteranos y dotarse de un reglamento que equipare formalmente las condiciones laborales del personal directivo, concejales y eventuales a las del resto de la plantilla. La decisión se toma después de un informe de la Sindicatura de Comptes publicado en julio que alertaba de que los premios de antigüedad son “retribuciones ordinarias no sujetas a la norma” y que ha habido sentencias desfavorables en otras administraciones que han creado jurisprudencia.

El paquete de novedades en materia laboral se votó en el pleno de finales de septiembre, pero la oposición lo tumbó acusando al gobierno del alcalde Jaume Collboni de haber actuado al margen de los sindicatos, que ese día llenaron la plaza de Sant Jaume en una sonora protesta. Este lunes, la suspensión de los premios y el recálculo de los trienios ha contado con el apoyo de los comunes (que han introducido una enmienda que pide diálogo con los sindicatos e iniciar la negociación de un nuevo convenio), ERC y Vox; y la abstención de Junts y PP. El punto sobre la modificación del Reglamento Orgánico Municipal para equiparar condiciones de los directivos se ha aprobado por unanimidad. Tras la votación, los sindicatos guardan silencio y esperan a valorar la decisión al próximo jueves, cuando se reunirán con los responsables municipales de personal.

La oposición se ha mostrado crítica con la forma de actuar del ejecutivo. Josep Rius, de Junts, ha acusado a Collboni de “ocultar el informe de la Sindicatura desde marzo” y ha apelado al diálogo. Desde los comunes, Jordi Martí Grau ha señalado la envergadura de la decisión, “porque cambia el sistema de cálculo de retribuciones aplicado desde los años 80″ y ha confiado en “recuperar la paz social”. En ERC, Jordi Coronas ha argumentado el sí de su grupo por la introducción de la enmienda que abre diálogo con los sindicatos.

El informe de la Sindicatura alertaba de que los premios de antigüedad (los reciben entre otros los veteranos de la Guardia Urbana o los Bomberos) y los trienios tal y como se pagaban no estaban sujetos a norma y no se podían remunerar como se ha hecho hasta ahora, cuando se calculaban en función de la última categoría laboral del empleado. Los premios se tendrán que dejar de dar y los trienios se pagarán en función de los años meritados en cada categoría de la vida laboral. Además, el informe de la Sindicatura prevé que algunos empleados deban devolver el dinero pagado por los trienios con el cálculo que no se considera ajustado a norma, pero todavía no se conoce a cuántos funcionarios afecta.

El segundo punto alertaba de la situación anómala de que se había aplicado a directivos, eventuales y concejales las condiciones laborales del convenio (vacaciones, permisos o retribuciones), sin que estuviera recogido en el Reglamento Orgánico Municipal (ROM), donde ahora se incorporarán, aunque de forma provisional hasta que se redacte un reglamento específico para estos trabajadores.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal