Una hoguera ‘ochentera’ de madera abre las fiestas de Alicante que prevén dos millones de visitantes
El monumento municipal alude al inicio de la celebración en 1928 al calor de la noche de San Juan
La Hoguera oficial de Alicante, elaborada por Pepe Espadero y titulada Leyendas alicantinas, se afianza ya en la Plaza del Ayuntamiento sobre una base de dos toneladas de madera, el doble que la del año pasado. La intención del artista alicantino es que el próximo lunes, día 24, arda de manera “lenta y limpia”, sin el humo que expelen los materiales menos tradicionales, como el corcho blanco. El estilo “ochentero” del monumento, que se basa en la narrativa ancestral de la provincia, es uno de los guiños a la historia de las fiestas, a cuya creación, en 1928, alude en dos ocasiones el bando del alcalde, Luis Barcala. Con los días grandes concentrados en este fin de semana, circunstancia que ha animado la reserva hotelera en toda la provincia, según la patronal hotelera Hosbec, las fiestas alicantinas, dotadas con 1,2 millones de euros en subvenciones municipales, comienzan a mirar atrás para encarar un centenario para el que aún quedan cuatro años.
No todas las tradiciones se adaptan a “la modernidad de este siglo XXI”, según señala Barcala en su bienvenida a las fiestas. Mientras que el gaditano José María Py concibió una celebración originariamente de cuatro días, del 21 al 24 de junio, para atraer visitas antes del arranque de la temporada alta estival, con las Fallas de Valencia como inspiración, el calendario de actividades de 2024 comenzó con el mes.
Desde el 1 de junio se organizan diferentes actos que han ido desembocando en esta semana. Desde el pasado lunes, se activaron los cortes de tráfico en la ciudad. Desde el pasado martes, resuenan las mascletaes en su ubicación habitual, la Plaza de los Luceros, pese a que instituciones como el Síndic de Greuges o asociaciones como Salvem el Nostre Patrimoni cuestionan el riesgo que suponen para su fuente central. Los dos monumentos oficiales, los de categoría especial y las barracas llevan toda la semana de montaje. Hoy, finalmente, con la plantà oficial, llega la fiesta propiamente dicha, que concluirá el lunes con la cremà.
El crecimiento de la fiesta de San Juan no afecta al número de monumentos, que sigue fijado en 180, entre adultos e infantiles. Pero sí a las partidas municipales destinadas a los diferentes aspectos de la celebración. El Ayuntamiento ha incrementado en 20.000 euros, hasta los 450.000, la cuantía destinada a la Federació de Fogueres, la entidad organizadora de las Hogueras, mientras que la suma total de ayudas a la construcción, almacenaje, reparación, mantenimiento, restauración, plantà y cremà de los monumentos se eleva a 727.300 euros, casi el 90% para las adultas. Solo en los diez monumentos de categoría especial, la Federació estima que se gastarán 968.000 euros. También en el ámbito de las partidas presupuestarias, el equipo de Gobierno que preside Barcala sacó adelante en solitario las gratificaciones extraordinarias para los empleados municipales, de Policía Local, agentes de movilidad, bomberos, departamento de gestión de emergencias y Protección Civil, que trabajen durante las fiestas, aunque con el rechazo de todos los partidos de la corporación municipal y de los sindicatos, que avisaron de que el número de voluntarios para estos días podría ser insuficiente.
La que sí parece asegurada es la asistencia masiva de visitantes, que Barcala cifra en unos dos millones de personas a lo largo de todas las jornadas festivas. La patronal Hosbec apunta que durante este fin de semana, las reservas hoteleras en la provincia de Alicante, principal beneficiada por las celebraciones de San Juan, rondan el 83% de ocupación, con un turismo nacional mayoritario, seguido de británicos, belgas, irlandeses, noruegos y franceses. Su principal punto de atracción serán las dos hogueras oficiales. La de Espadero, de “dimensiones espectaculares”, según el propio artista, y que alude a leyendas como la Cara del Moro del Castillo de Santa Bárbara, San Nicolás y el Negre Lloma, además del Sant Jordi alcoyano, la Encantá de Rojales, el Cantó ilicitano, la Virgen de Agres o el Lobo Marino de la isla de Tabarca. Y la infantil, de Sergio Gómez, llamada Llum d’Alacant, que alude a la luminosidad como fuente de inspiración para artistas y que presenta como elemento más atractivo un arco iris que une los dos castillos alicantinos, el de Santa Bárbara y el de San Fernando.