El chico de oro del diseño gráfico que sueña con rediseñar el logo de una cervecería de Brooklyn
Hace unos meses, ‘Variety’ anunciaba el fichaje del Raúl Águila como nuevo director creativo. El cubano, que ha diseñado algunas de las revistas más icónicas del panorama internacional, ha transformado profundamente el diseño editorial en la última década
Hay descubrimientos que pueden cambiar la vida. Para Raúl Águila (La Habana, 1983) las portadas creadas por Paul Sahre, uno de los diseñadores gráficos más influyentes de las últimas décadas, fueron una revelación. “La primera imagen que me impactó fueron las portadas de las novelas del escritor Rick Moody diseñadas por Paul Sahre”, confiesa. “Ya estaba familiarizado con el gran trabajo de diseñadores como ...
Hay descubrimientos que pueden cambiar la vida. Para Raúl Águila (La Habana, 1983) las portadas creadas por Paul Sahre, uno de los diseñadores gráficos más influyentes de las últimas décadas, fueron una revelación. “La primera imagen que me impactó fueron las portadas de las novelas del escritor Rick Moody diseñadas por Paul Sahre”, confiesa. “Ya estaba familiarizado con el gran trabajo de diseñadores como Paul Rand, Saul Bass, Alan Fletcher, Herb Lubalin o Josef Muller Brockmann, y de golpe, la simplicidad gráfica y la fuerza conceptual del trabajo de Sahre me intrigaron”. El impacto de su obra le empujó a trasladarse a Nueva York para estudiar diseño gráfico en la Escuela de Artes Visuales donde Sahe ejercía de profesor.
Pero antes de marchar a la gran manzana a estudiar, Raúl Águila ya había hecho otras mudanzas. A principios de la década de los noventa, sus padres dejan Cuba y emigran a Miami. “Tengo recuerdos maravillosos de cuando era niño, jugando en las calles de La Habana y pasando tiempo con la familia. Sin embargo, no tener cubiertas las necesidades básicas en la isla hizo a mis padres tomar la decisión de emigrar a Estados Unidos”. Así fue cómo su familia se asentó en el sur de Florida. “Si no hubieran tomando esta decisión, mi vida sin duda hubiera sido muy diferente”, reconoce Águila.
“Desde que tengo uso de razón he dibujado en la parte posterior de todos mis libros de texto”, recuerda sobre su atracción por la ilustración y las imágenes. Los dibujos animados protagonizados por Elpidio Valdés, el personaje creado por el cineasta y dibujante cubano Juan Padrón se encuentran en un lugar destacado de su memoria infantil. “Estaba obsesionado con sus dibujos. También me gustaban mucho los dibujos animados clásicos estadounidenses: Bugs Bunny, Tom & Jerry, Popeye...”.
En Nueva York, Águila descubrió el Manga japonés y el cómic americano. “Todo esto contribuyó a mi curiosidad y posterior interés por el diseño gráfico”. En Estados Unidos, la abundancia gráfica está presente en todos los rincones: en la publicidad, en los rótulos de los comercios, en los diarios y revistas e incluso en los paquetes de cereales para desayunar ilustrados con mascotas como Tony Le Tiger. “Mi sueño de niño era convertirme en dibujante de cómics, por eso mis primeros estudios fueron en el campo de la ilustración en el Pratt Institute de Nueva York, pero rápidamente me di cuenta de que estaba más interesado por el diseño gráfico, así que me pasé a la Escuela de Artes Visuales en mi tercer año. Mi formación fue multidisciplinar, con clases de pintura, escultura, fotografía, serigrafía, tipografía conceptual, editorial, branding y teoría conceptual”.
”Tuve la suerte de que algunos de mis profesores trabajaban en The New York Times Magazine y me enamoré del diseño editorial, una disciplina gráfica que desconocía”, explica. Al acabar sus estudios, Águila empezó a trabajar en New York Magazine, revista semanal fundada en 1968 por Milton Glaser y Clay Felker como rival de The New Yorker. “Fue mi primer trabajo, un destino de ensueño que supuso una etapa formativa fundamental para mí. Aprendí una de las claves de este oficio, el trabajo en equipo. Fue un aprendizaje increíble trabajar mano a mano con editores, equipos de fotografía y de diseñadores. Sin la experiencia y la confianza que conseguí en New York Magazine no estaría donde estoy hoy”.
Otro periodo fundamental en su trayectoria es su paso por la revista New York Times Magazine. Allí coincidió con la directora creativa Gail Bichler, la mujer que ha dado a la publicación un giro de 360 grados en los últimos quince años, incorporando las nuevas tecnologías, transformando la publicación en un festín creativo entre lo visual y lo periodístico. “Creo que es la directora creativa que más ha influido en mi carrera. Es alucinante el trabajo que realiza semanalmente con la revista, ella y su equipo, cada proyecto supone darle un nuevo enfoque al diseño, la fotografía y la dirección de arte”.
Después de su paso por los dos semanarios neoyorquinos, el cubano puso su firma como director creativo en las revistas WIRED y Esquire. “Cada proyecto me ha enseñado que para tener éxito debes establecer relaciones sólidas con todos los implicados en él. Como director creativo busco ampliar los límites del diseño de la revista y encontrar formas nuevas e interesantes de comunicar y evocar emociones. Tanto la fotografía como la tipografía se pueden utilizar para abrir nuevos campos al diseño”.
La revista Variety, toda una institución en el mundo del cine y del espectáculo, anunciaba en 2020 el fichaje de Raúl Águila como nuevo director creativo. La editora jefe, Claudia Eller, comunicaba con entusiasmo su llegada: “Resulta muy emocionante dar la bienvenida a un creador con tanto talento en nuestra familia Variety”.
“La revista Variety es una oportunidad maravillosa en mi carrera. Es la primera gran publicación de gran formato en la que trabajo y los plazos para rediseñarla en medio de la pandemia han sido todo un desafío. Además hay que tener mucho cuidado porque si haces cambios muy radicales puedes acabar confundiendo al lector. Por ejemplo, el diseño de The New Yorker es simple, clásico y hermoso y la forma de trabajar en un diseño tan clásico se debe hacer a través de la dirección de arte de la fotografía y la ilustración”.
Después de más de una década, Águila es consciente de que su estilo sigue evolucionando sin perder algunas constantes, como la utilización de una tipografía orgánica, fuerte y audaz y la infografía de visualización de datos. Un estilo que, según él, empezó a definirse en sus épocas en New York Magazine y WIRED. “También fue fundamental como inspiración creativa el trabajo del diseñador Chris Ashworth en la revista musical Raygun”. El cubano solo espera seguir ensanchando los límites del diseño gráfico y rediseñar, algún día, el logo de la cervecería Sixpoint Brewery de Brooklyn. Si es verdad aquello de que se hace camino al andar, lo más probable es que Raúl Águila termine cumpliendo su objetivo.