Alonsomanía 2023, la revolución de los “padres” en TikTok: “Ya solo nos falta Rafa Nadal”
Contra todo pronóstico, la nueva estrella de la red social china es Fernando Alonso. El piloto de Fórmula 1, bien asesorado, parece conocer los trucos para dominar un medio que generacionalmente no le pertenece.
“No te pases de frenada que el que padrea en TikTok soy yo”, le dijo hace solo unos días Iker Casillas a Fernando Alonso a través de un vídeo de TikTok. La reacción, pronunciada más en tono de guasa que de auténtico beef, fue quizá la confirmación definitiva de algo de lo que...
“No te pases de frenada que el que padrea en TikTok soy yo”, le dijo hace solo unos días Iker Casillas a Fernando Alonso a través de un vídeo de TikTok. La reacción, pronunciada más en tono de guasa que de auténtico beef, fue quizá la confirmación definitiva de algo de lo que muchos usuarios de la plataforma china y medios de comunicación ya habían notado: que Fernando Alonso ha conseguido convertirse en muy poco tiempo en una figura muy relevante en la red en la que, hasta ahora, el antiguo portero del Real Madrid era el rey indiscutible de un cringe que podríamos denominar como “amable”.
Casillas cambió el tipo de contenido que subía a TikTok hace más o menos un año. De repente, en lugar de que todas sus publicaciones girasen alrededor del fútbol o de sus hitos deportivos del pasado, el guardameta retirado comenzó a mostrar en esa red una cara más amable, más humana, pero que también daba un poco de vergüenza ajena. Vídeos de él yendo al cine llevando las palomitas de casa, poniendo caritas en el ascensor o haciendo algo que podría definirse como bailar. Uno se ríe, pero no por lo que Casillas cree que es gracioso.
Mucha gente se preguntaba qué le estaba pasando al pobre de Iker, y le echaban la culpa a su reciente divorcio, colocándolo como uno de los máximos representantes a nivel nacional de la llamada “energía de hombre divorciado”. Un fenómeno del que hablaron ampliamente las periodistas Andrea Gumes y Anna Pacheco en su programa Ciberlocutorio relacionándolo con otros personajes como Gerard Piqué o Pau Gasol.
Visto con un poco más de distancia, este cambio en el comportamiento online de Iker, más que un ejemplo de locura transitoria, parece más bien un magnífico ejemplo de lúcida estrategia de comunicación.
Ahora parece que la historia se repite con Fernando Alonso, que se abrió una cuenta en TikTok el 10 de febrero de este año y que desde entonces ha ganado más de 1,2 millones de seguidores, lo que lo ha situado al nivel de otros compañeros de la parrilla de la Fórmula 1 mucho más jóvenes como Charles Leclerc (1,9 millones), Carlos Sainz (1,5 millones) o Lando Norris (1,3 millones), a quienes por edad, en teoría, les pega mucho más crear contenido para esa plataforma.
Un caso de éxito digno de estudio
No es fácil condensar en pocas palabras en qué ha consistido la estrategia para convertir a Alonso en un personaje relevante en TikTok. Visto desde fuera, por alguien que no tuviera ni idea de redes sociales, podría parecer que los vídeos de Fernando no tienen mucho sentido: ¿por qué sale regando unas flores? ¿Por qué un vídeo en el que simplemente aparece sentado en una silla, mirando el móvil, mientras suena una canción acelerada de Taylor Swift y guiña un ojo tiene más de cinco millones de reproducciones? Ese quizá es el primero de los grandes pilares de su estrategia: para entenderlo tienes que estar un poco al día de lo que está pasando en internet.
Pero hay mucho más. “Creo que Alonso está sabiendo aprovechar muy bien las tendencias de TikTok, los sonidos que están en tendencia, los rumores como el que lo relacionaban con Taylor Swift, el misterio del meme de “la 33″ (que tiene que ver con el objetivo de que el piloto consiga su victoria número 33 en un Gran Premio), sumarse a todos los memes del momento e incluso jugar también con los que sus propios fans le lanzan”, explica Janira Planes, directora de la plataforma de educación Wuolah y experta en cultura de Internet. “También está explotando mucho esa parte suya más troll, más bromista, parecido a lo que hace Casillas, que quizá genera un poco de cringe, pero que en realidad gusta al público: resulta gracioso y entrañable. Ambos han conseguido hablar a la gente que está en TikTok en su propio lenguaje, no con vídeos hiperproducidos, sino mostrando su parte más… Casi ridícula, como en el vídeo en el que riega las plantitas. Creo que Alonso, junto a su agencia de comunicación y representación, A14 Management, han entendido que ser relevante en TikTok en la actualidad hace que seas relevante también a nivel sociocultural de alguna manera”.
Esto se debe, entre otras cosas, a que, hoy en día, la relevancia social que se consigue en las redes se amplifica a través de otros medios instantáneamente. Periódicos, radios y televisiones llenan cada día páginas y horas de emisión con contenidos que sacan directamente de las redes. Literalmente actúan como traductores de internet para las personas que no están “extremadamente online”.
Gracias a toda esta nueva vida online y también, claro está, a sus éxitos deportivos (actualmente el piloto asturiano es tercero en el Mundial de Pilotos y se ha subido ya cinco veces al podio en lo que va de campeonato), hemos visto renacer de sus cenizas a la Alonsomanía, un término que muchos ya habían olvidado y que nos retrotrae a aquellos lejanos 2005 y 2006, durante los que Fernando, a ritmo de Besos de El Canto del Loco, El universo sobre mí de Amaral o Caminando por la vida de Melendi, se hizo con dos Campeonatos del Mundo seguidos al volante de un Renault.
Quién hay detrás de todo esto
Obviamente, por muy bromista que sea, Alonso es una persona muy ocupada y no ha sido el responsable de idear la estrategia de contenidos de sus cuentas en redes sociales, ni está al día de todas las tendencias de internet. Como decíamos antes, probablemente quien está detrás de toda esta estrategia es su propia agencia A14 Management, que no solo se ocupa de su carrera, sino que también gestiona la de otros pilotos jóvenes como Maximilian Günther, Josep María Martí o el jovencísimo Andrés Cárdenas.
“Es muy posible que Alonso cuente con una o dos personas, o quizá más, dedicadas a pensar todos los contenidos que genera para redes sociales, tanto para TikTok como para el resto, ya que Fernando está en casi todas ellas”, explica Planes. “Un equipo que está muy pendiente de todas las tendencias en las plataformas, que están siempre muy cerca del piloto y le van diciendo qué grabar en cada momento. Está claro que él le pone su gracia, pero todo está consensuado con un equipo”. A pesar de intentarlo en repetidas ocasiones, fue imposible hablar con A14 Management.
¿Nos estamos adentrando en la edad dorada del padreo en TikTok?
En el vídeo de Casillas del que hablábamos al inicio de este artículo, llamaba la atención un comentario del usuario @southandi en el que se podía leer: “Ya solo nos falta Rafa Nadal”. Esta afirmación, que no sabemos si expresaba más temor que broma, puede ser que pronto se convierta en una profecía.
“Sí, creo que vamos a empezar a ver cada vez más este tipo de casos”, se atreve a vaticinar Janira. “Es curioso cómo la mayoría de los famosos tardaron bastante en entrar en TikTok porque parecía una red más ‘para gente normal’. Pero cada vez hay más. O sea, que no me extrañaría que Rafa Nadal también comenzara a postear contenido en TikTok, aunque quizá es un personaje que se toma un poco más en serio que Iker o Fernando. Pero quién sabe, creo que salir de su zona de confort dice mucho de estos deportistas, en sentido positivo. Saben que para conectar con su comunidad, con su público, con sus fans, tienen que estar donde están esos fans y no endiosarse. Sobre todo porque, al final, tener esa presencia online les va a traer más y mejores patrocinios, les va a ayudar a seguir siendo relevantes y a seguir teniendo tu cuota de aparición en medios. Es un círculo virtuoso bastante importante para cualquier deportista famoso que quiera hacer algo que vaya más allá que su trabajo como deportista”, concluye.
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