Marcelo Ebrard: “Boric va a ser un referente de la nueva generación progresista de América Latina”
El canciller de México, que recibe la presidencia de la Alianza del Pacífico, analiza durante su visita a Colombia el futuro del bloque, lo que representa la llegada de Boric en Chile y el diálogo entre el Gobierno y la oposición venezolanos
Poco dado a inmiscuirse en lo que ocurre fuera de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha delegado desde el inicio de su Gobierno la gestión de la activa diplomacia del país norteamericano a Marcelo Ebrard (Ciudad de México, 62 años). El canciller emprendió esta semana una gira que lo llevó a Colombia, donde también se celebró la cumbre de la Alianza del Pacífico, de la que México acaba de tomar el testigo de la presidencia pro tempore. En Bogot...
Poco dado a inmiscuirse en lo que ocurre fuera de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha delegado desde el inicio de su Gobierno la gestión de la activa diplomacia del país norteamericano a Marcelo Ebrard (Ciudad de México, 62 años). El canciller emprendió esta semana una gira que lo llevó a Colombia, donde también se celebró la cumbre de la Alianza del Pacífico, de la que México acaba de tomar el testigo de la presidencia pro tempore. En Bogotá, donde se reunió con la vicepresidente y canciller, Marta Lucía Ramírez, Ebrard destacó que Colombia y México son dos grandes naciones, pero lamentó el exceso de narcoseries que distorsionan la imagen de ambos países. “Tenemos que hacerle frente”, señala en una entrevista telefónica con EL PAÍS, antes de partir a Honduras para la toma de posesión de la presidente Xiomara Castro este jueves. En la conversación, el jefe de la diplomacia mexicana también anticipó que el ingreso de Ecuador como nuevo miembro del bloque que comparte con Colombia, Perú y Chile se dará en los próximos meses, y celebró la llegada de Gabriel Boric al poder en el país austral como una renovación política para toda América Latina.
Los cuatro socios fundadores de la Alianza del Pacífico, que se acerca a sus primeros 10 años, han experimentado en ese periodo cambios en la tendencia ideológica de sus Gobiernos, que ahora mismo ocupan López Obrador en México, Iván Duque en Colombia, Pedro Castillo en Perú y, ya de salida, Sebastián Piñera en Chile. Colombia, además, celebrará en mayo la primera vuelta de las elecciones presidenciales. A pesar de esos giros, “no se anticipa que la Alianza del Pacífico pierda interés o fuerza. Ya hay una serie de acuerdos de libre comercio entre los países que no se avizora que se vayan a modificar”, destaca Ebrard. “Ahora la mirada de la Alianza está en incrementar su vínculo con países como Singapur, que se acaba de integrar, Corea del Sur, Japón, Canadá… ¿Qué cambios podría haber en el futuro? Que la Alianza se complemente y no sea nada más libre comercio”.
Los miembros de la Alianza acaban de firmar un inédito acuerdo comercial con Singapur. “Es un avance muy significativo porque no tenía ningún socio del otro lado del Pacífico. Ahora tiene un socio crucial, importantísimo. No solo por el éxito que ha tenido, porque es una economía muy pujante, si no porque es un punto logístico estratégico entre los dos lados del Pacífico. Viene a aportarle una dimensión nueva a la Alianza, eso es promisorio, y va a precipitar o acelerar la incorporación de otros países del otro lado de la costa del Pacífico, como Corea del Sur”, reafirma el diplomático mexicano.
El encuentro de mandatarios en Buenaventura –al que no asistió López Obrador, pero sí una delegación mexicana– fue también la despedida de este tipo de foros para Piñera, que entrega el poder el 11 de marzo. México apunta a consolidar una alianza que incorpore a su estrategia regional al presidente electo Gabriel Boric, al que Ebrard ya visitó en Santiago este enero. “Para América Latina –y especialmente en México, por la influencia y la estrechísima relación que ha habido con Chile, sobre todo después del golpe–, diría yo que va a ser un referente para la nueva generación de las fuerzas progresistas. Es un aire fresco, es una nueva forma, idea y composición de una coalición progresista importante, que vemos con simpatía e interés. Es una gran novedad. Seguramente traerá una renovación para toda América Latina”, valora el canciller.
En la cumbre participó también el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, quien espera concluir este año el ingreso de su país en ese bloque creado en abril de 2011. “Tengo la convicción de que así será, ya están muy avanzadas las pláticas para ese propósito. El ingreso de Singapur y otras decisiones aproximan que lo de Ecuador se tenga que resolver en estos próximos meses”, señala Ebrard. La Alianza se propone, entre otras, facilitar el flujo de personas entre sus miembros. México reinstauró en agosto la visa de entrada para ciudadanos ecuatorianos ante una nueva oleada migratoria, tras detectar que había redes que llevaban migrantes hasta Estados Unidos. “No veo yo que esa medida de las visas, que además es temporal, pudiera significar ningún tipo de dificultad para la integración de Ecuador”, declara el secretario de Relaciones Exteriores.
México ha recuperado protagonismo regional con la llamada diplomacia de las vacunas, que el propio Ebrard ha defendido ante Naciones Unidas. Todos los países de la Alianza apoyaron la resolución en la Asamblea de la ONU, que fue una de las más votadas en la historia, exigiendo el acceso equitativo y universal a vacunas, tratamientos y medicamentos, destaca Ebrard. “La pandemia nos dejó claro que hay dos bloques de países. Los que tienen capacidad de producción de vacunas y los que dependemos de que otros países hagan el desarrollo y no lo compartan. Lo que estamos haciendo es procurar que las empresas de los países desarrollados tengan presencia y podamos producir en combinación con esas empresas en nuestros países, así como impulsar y facilitar la investigación y desarrollo en nuestro propios países. No podemos olvidar o pasar por alto las lecciones de esta pandemia”, explica.
A su paso por Bogotá, Ebrard anunció que se proponen de manera conjunta contrarrestar el peso del estigma del narcotráfico en la imagen internacional de ambos países. “Las narcoseries se han especializado en buena medida en la imagen de México y de Colombia. Entonces, tenemos que hacerle frente, que hacer una gran acción cultural. El cine, las series, van formando una cultura popular, tenemos que actuar ahí. También se formó un equipo de trabajo que nos va a proponer una serie de posibles acciones que tengan sentido, para poder presentar la cultura de nuestros pueblos de una manera competitiva y eficaz. Estaremos dando a conocer los pasos que demos. Entendemos que eso no se resuelve en un día, pero tenemos que proponerlo. El inicio, es ese. Tenemos que tener acciones en lo inmediato para competir con esa idea tan negativa que promueven esas denominadas narcoseries”, apunta. “Nos vamos a meter al mundo de las series, del cine. México y Colombia tienen un poder importante en ese ámbito. Tenemos grandes cineastas, directores, fotógrafos, al igual que Colombia. Los vamos a convocar para pensar en esto. Defender nuestra lengua, nuestra cultura, nuestra civilización”.
Además, limó las asperezas provocadas por el llamado cuartito de los aeropuertos mexicanos, donde las personas son retenidas antes de ser admitidas o devueltas a sus países. Colombia ha protestado por las inadmisiones, que han tensado las relaciones con varios países sudamericanos. “Hemos convenido un sistema, que propuso en buena medida Colombia, que es una especie de prechequeo electrónico, de manera que evitemos los inadmitidos. Son personas que llegan a México y no tienen, de acuerdo a las normas vigentes, el hotel donde van a estar u otras cosas. Para evitar la discrecionalidad vamos a tratar de implementar ese prechequeo”, ha explicado Ebrard. “No es una visa, es un prechequeo de carácter electrónico. Vamos a procurar que sea lo más sencillo posible”.
La diplomacia mexicana también ha cobrado relevancia al auspiciar las difíciles negociaciones entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición venezolana que han tenido varias rondas en Ciudad de México. “Nosotros estamos en favor de que haya un diálogo, hemos estado insistiendo en ello. Hemos procurado facilitarlo, se dieron varias reuniones allá en México y ahora estamos en un impasse, pero tenemos la esperanza de que se pueda recuperar pronto ese diálogo en donde Noruega también ha jugado un papel fundamental”, dice el canciller. “Vale la pena y es una apuesta que debemos mantener en búsqueda de que los propios venezolanos acuerden cómo resolver las diferencias que tienen, y entonces se pueda desmantelar la situación que hoy se vive y también superar las sanciones que se le han impuesto a ese país”, señala. “Yo veo que ha habido una buena disposición (…) ojalá en las próximas semanas tengamos buenas noticias para retomar el paso”.
–¿Las elecciones regionales de noviembre tuvieron las garantías de un régimen democrático?
–Creo que se avanzó mucho. Desde luego que no le corresponde a México calificar los procesos que se lleven a cabo, ni es de su interés. Pero lo que sí nos importa es que el diálogo rinda frutos, y por lo que pudimos observar en los diálogos en Ciudad de México hay algunos avances significativos.
– ¿A pesar de la repetición de las elecciones en el estado de Barinas?
– La ruta del diálogo es la única ruta posible. Las otras rutas que se han planteado han sido estrepitosos fracasos. A veces el diálogo cuesta tiempo y paciencia, pero no hay nada mejor que ese camino.
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