Al menos 85 personas mueren en Yemen en una estampida durante un reparto de ayuda
Se investigan las causas de la tragedia, que se ha producido en la zona vieja de la capital, Saná
Al menos 85 personas han muerto este jueves en Saná, la capital de Yemen, en una estampida que se ha producido en un centro de distribución de ayuda donde se concentraban cientos de personas, según han informado testigos a los medios locales. Hay, además, más de 300 heridos. Se investiga si la tragedia se desencadenó por disparos al aire de los milicianos Huthi que controlaban a la multitud o por alguna otra causa. “85 personas han muerto y más de 322 están heridas” como consecuencia de la estampida, que se ha producido durante la noche en un reparto de ayuda organizada en el barrio de Bab el ...
Al menos 85 personas han muerto este jueves en Saná, la capital de Yemen, en una estampida que se ha producido en un centro de distribución de ayuda donde se concentraban cientos de personas, según han informado testigos a los medios locales. Hay, además, más de 300 heridos. Se investiga si la tragedia se desencadenó por disparos al aire de los milicianos Huthi que controlaban a la multitud o por alguna otra causa. “85 personas han muerto y más de 322 están heridas” como consecuencia de la estampida, que se ha producido durante la noche en un reparto de ayuda organizada en el barrio de Bab el Yemen, según ha afirmado un responsable de seguridad de los rebeldes Huthi, que controlan la ciudad desde 2014.
Desde hace más de ocho años, el país está devastado por la guerra entre los rebeldes Huthi, respaldados por Irán, y las fuerzas gubernamentales, organizadas en la ciudad de Adén, al sur del país, apoyadas por una coalición militar encabezada por Arabia Saudí.
Un testigo ha relatado a la agencia France Presse que la avalancha se produjo en un colegio de la parte vieja de la ciudad, donde se repartía ayuda financiera —5.000 riales por persona, unos 7,3 euros—, lo que había congregado a una multitud. El reparto de dinero es habitual durante el mes de Ramadán, el mes sagrado de los musulmanes en el que ayunan entre la salida y la puesta del sol y que termina esta semana. El acto había sido organizado por comerciantes de la zona, según el departamento de Interior de los rebeldes. Entre las víctimas de la estampida hay niños y al menos medio centenar de los heridos están graves. Tres de los comerciantes que organizaron el reparto de dinero habrían sido ya detenidos, según un responsable de la seguridad de Saná, citado por France Presse.
El Gobierno Huthi abre una investigación
“Actualmente, estamos comprobando los heridos y los fallecidos”, ha afirmado el primer ministro Huthi, Abdulaziz Bin Habtour, en declaraciones recogidas por Reuters desde el lugar del siniestro. “Los ministros del Interior y de Sanidad, así como miembros de la Fiscalía, el líder del Consejo Judicial Supremo y otras autoridades ya han comenzado las tareas legales para investigar lo sucedido y evitar que vuelva a ocurrir”, ha añadido Bin Habtour. “Estamos ante una gran tragedia”, ha concluido.
El presidente del Consejo político Supremo de los rebeldes Huthi, Mehdi al Mashat, ha anunciado la creación de “una comisión encargada de investigar las causas del incidente”. Mohamed ali al Huthi, miembro de la dirección de los rebeldes, ha atribuido la catástrofe al “exceso de gente” que se había congregado en una calle estrecha que lleva al colegio. Cuando han abierto las puertas, la muchedumbre se ha precipitado por las escaleras de acceso al centro, donde se repartía el dinero. Otros testigos afirman que la avalancha se ha producido después de algunos Huthi que intentaban controlar a la multitud disparasen al aire, alcanzando algún cable de electricidad que ha estallado, provocando el pánico.
Desde el Gobierno militar, se ha culpado a los rebeldes hutíes de la estampida. “La responsabilidad por la masacre de Saná, ocurrida en uno de los centros de distribución de ayuda perteneciente a un comerciante, recae sobre quienes saquearon el tesoro público y las reservas públicas del Estado y suspendieron el pago de salarios hace ocho años”, ha publicado en Twitter el ministro de Información yemení, Muamar al Eryani. En la misma red social ha expresado su conmoción por el incidente el enviado de la ONU para Yemen, Hans Grundberg: “Toda mi oficina y yo estamos profundamente dolidos y entristecidos por la trágica estampida. Mis más sinceras condolencias a todos los yemeníes afligidos hoy, y deseo a los heridos una pronta recuperación”. Desde el Gobierno de Egipto también han mostrado “total solidaridad con el pueblo y el Gobierno de Yemen”, según un comunicado emitido por el ministerio de Exteriores.
Sigue toda la información internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.