Guerra en Oriente Próximo: resumen del 03/12/2024

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El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, aseguró este martes que el ejército de su país no distinguirá entre milicianos y población libanesa si el alto el fuego con Hezbolá fracasa. En una visita a la frontera norte de Israel, el ministro de defensa instó al Gobierno libanés a “autorizar al ejército para cumplir su parte, a mantener a Hezbolá lejos del río Litani y a desmantelar toda su infraestructura”. “Si el alto el fuego fracasa, no habrá más exención para el Estado libanés. Haremos cumplir el acuerdo con el máximo impacto y tolerancia cero. Si hasta ahora hemos diferenciado entre Líbano y Hezbolá, no lo haremos más”, abundó Katz.

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, insistió durante una reunión de su gabinete de Gobierno que su país “está en un alto el fuego con Hezbolá” pero que este “no es el fin de la guerra”. “Estamos actualmente en un alto el fuego. Reitero, un alto el fuego, no en el final de la guerra”, manifestó, agregando después que el objetivo es “devolver a los residentes del norte [a sus hogares] y rehabilitar el norte”. Para ello, dijo el primer ministro, Israel “está cumpliendo el alto el fuego con puño de hierro, actuando ante cualquier violación de lo pactado, menor o mayor”. Netanyahu acusó a la milicia libanesa Hezbolá de violar el acuerdo, justificando así los ataques del ejército israelí sobre más de 20 objetivos en el sur de Líbano este lunes.

En Gaza, donde 14 personas murieron por ataques israelíes, Hamás y la Autoridad Palestina lograron un acuerdo para formar un comité para administrar la Franja de forma conjunta una vez termine la guerra. El pacto llegó tras una propuesta con mediación egipcia y se alcanzó tras una serie de reuniones en El Cairo que concluyeron este lunes. El comité será integrado por entre 10 y 15 miembros y se encargará de la distribución de ayuda humanitaria, supervisará la administración civil de Gaza y coordinará los esfuerzos de reconstrucción. También supervisará el paso fronterizo de Rafah con Egipto.

Hamás gobierna de facto en Gaza desde que en 2007 usó la fuerza para arrebatar el enclave al movimiento secular Fatah, que actualmente gobierna partes de Cisjordania bajo la Autoridad Palestina. Israel rechaza cualquier papel del movimiento islamista en Gaza una vez finalizada la guerra. El domingo, Egipto entregó a Hamás y Fatah un documento en el que propuso una tregua de 60 días con Israel y un intercambio de prisioneros y rehenes entre ambas partes, así como la reapertura del paso de Rafah a partir de este mes.