El ‘número dos’ de Caja Madrid culpa a la presidencia de las tarjetas fantasma
Sánchez Barcoj dice que eran los presidentes los que definían y controlaban lo que se gastaban los consejeros
Ildefonso Sánchez Barcoj, ex director financiero de Caja Madrid y de Bankia, asegura que todo el sistema de tarjetas opacas “se controlaba y se designaba desde la secretaría de Presidencia”, es decir, desde el departamento que dirigía primero Miguel Blesa y después Rodrigo Rato. “La secretaría de Presidencia establecía el límite máximo y tenía acceso a todos los movimientos que realizaban las tarjetas. Ese departamento es el que tenía el control sobre lo que se pagaba; ningún empleado podía estar por encima de lo de asignaba Presidencia”, han comentado en su nombre las fuentes jurídicas que llevan la defensa de Sánchez Barcoj.
Otros ejecutivos consultados por este periódico han confirmado que las asignaciones y el control de gastos estaban bajo la supervisión de Presidencia “como no puede ser de otra manera en una cuestión tan delicada como ésta”, comentan.
Sánchez Barcoj ha aparecido en el listado de tarjetas opacas con un gasto de 484.200 euros [en los documentos facilitados por Bankia figura además otro gasto de 90.900 euros en 2011 y 2012], lo que le convierte en el primero de una lista de 86 consejeros y directivos. Sus pagos anuales ascendieron a una media de 60.500 euros. No obstante, insiste en que no eran tarjetas opacas y que no ha hecho nada irregular. “Jamás se me advirtió de que el uso de la tarjeta podía no ser correcto, pese al control que existía sobre las tarjetas”. Asegura que se podían revisar desde el departamento de Tarjetas, desde el de Contabilidad y desde la Auditoría Interna. Sin embargo, Bankia afirma en el informe enviado a la Fiscalía que estaban fuera del sistema de la entidad y que sus gastos se atribuían a otros legales de representación así como a “errores del sistema de software”, como sistema de camuflaje.
Sánchez Barcoj no era un directivo corriente en Caja Madrid. Estuvo 34 años en la entidad y se recorrió todo el escalafón desde abajo. De origen humilde, logró un puesto relevante bajo la presidencia de Jaime Terceiro; después se convirtió en mano de derecha de su sucesor, Miguel Blesa, y se mantuvo como director general financiero con Rodrigo Rato. La llegada de José Ignacio Goirigolzarri supuso el final de su carrera. Fue indemnizado en febrero de 2014 con 300.000 euros, pero asegura que los donó a Cruz Roja y Cáritas. A la vez, Bankia prescindió de Isabel Bastit, su mujer, que era responsable de la territorial de Madrid Sur.
Según un informe de Bankia, los gastos se destinaron a restaurantes, hipermercados, viajes y extracciones en efectivo. Por eso, Bankia reclamó a Sánchez Barcoj 90.900 euros, lo que gastó entre 2011 y 2012, y los devolvió. Aun le quedarían por ingresar 393.300 euros. Sin embargo, dice estar dispuesto a entregar los 484.200 euros a la Fundación Caja Madrid, con lo que habría devuelto 575.100 euros.
Ha escrito una carta al director general de esta institución, José Guirao, en donde le pide el número de cuenta para realizar el ingreso. “Si para el día 10 de octubre no ha tenido respuesta, ingresará el dinero en el juzgado”, asegura su abogado.
¿Realizó Sánchez Barcoj gastos en supermercados o en comidas privadas? El no lo niega, pero se defiende diciendo que “en ocasiones, utilizaba la tarjeta privada para pagar gastos que correspondían a la entidad financiera por su condición de directivo. No pasaba cargos de estos gastos y, para compensarlo, en otros momentos utilizó la tarjeta de Caja Madrid o Bankia para compras privadas”. Dice estar dispuesto a revisar todos los movimientos y demostrar que no ha hecho un uso indebido. Ahora el balón está en manos del juez Ruz.
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