El exalcalde del PP imputado por contrabando paga y esquiva la prisión
'Nené' Barral zanja con la justicia su primera causa penal por dos delitos fiscales mientras afronta otra anterior que lo implica en un alijo de tabaco cuando era regidor de Ribadumia
José Ramón Barral, Nené, el que fuera alcalde del PP de Ribadumia durante 18 años con mayorías absolutas, ha cerrado este miércoles en apenas un cuarto de hora su primer envite judicial derivado de dos delitos fiscales mientras tiene abierto otro asunto penal que le implica en un alijo de tabaco de contrabando. Barral ha logrado esquivar los ocho años de prisión que le pedía el fiscal con un juicio de conformidad por el que ha visto reducida a un año y dos meses su condena que finalmente no cumplirá, al conmutarla por una multa de 4.620 euros.
El exregidor popular ha asumido los dos delitos fiscales por ocultar a Hacienda los ingresos que obtuvo derivados de sus negocios eólicos y acuícolas en China y Chile en los ejercicios de 2006 y 2007 por los que tuvo que adelantar 700.000 euros, cantidad a la que ahora habrá que sumar las multas y las costas del proceso. A cambio de que Barral reconociese el fraude y pagase al fisco, la fiscalía ha retirado la acusación contra las tres hijas del expolítico que estaban imputadas como socias de su padre en una sociedad offshore, que operaba desde las Islas Vírgenes Británicas hasta que asumió los cargos de representación un súbdito chino.
Con este capítulo zanjado con el pago por adelantado de casi 700.000 a Hacienda, más las multas y las costas del juicio, Barral Martínez, de 72 años, deberá afrontar ahora otra causa, la que desencadenó su detención en mayo de 2001 como presunto dirigente de una sofisticada organización de contrabando de tabaco, tras la aprehensión de casi medio millón de cajetillas en un contenedor en el puerto de Vigo.
El asunto está atascado desde entonces en un juzgado de Vilagarcía por las trabas que puso Suiza para investigar presuntos cuentas de Barral. El caso no se ha archivado al estar implicados en un delito de cohecho la mayoría de los 20 imputados, entre ellos un guardia civil y un aduanero.
La detención de Nené Barral hace ahora 15 años y su dimisión en la alcaldía arrastró a su hermano Feliciano, entonces presidente del PP local, también implicado, provocando una tormenta política en el partido gallego a unos meses de las elecciones autonómicas de 2001, las últimas que ganaría con mayoría absoluta el entonces presidente Manuel Fraga.
Flanqueado por su hermano, Nené Barral ha llegado este miércoles a los juzgados de Pontevedra con sus abogados aparentemente tranquilo, en la que es su primera aparición pública —desde la rueda de prensa que convocó para despedirse de la alcaldía— pero esquivando a la prensa que esperaba alguna declaración. “No me toca hablar todavía, primero que lo hagan los jueces y luego lo haré yo”, zanjó Barral a EL PAÍS antes de entrar en la sala de vistas de los juzgados.
El que fuera uno de los alcaldes más mediáticos del PP gallego emprendió, dos años después de su detención, su propia aventura política creando el partido Independientes por Ribadumia, que en las elecciones municipales de 2003 estuvo a punto de ganar la alcaldía, quedando a solo dos votos de diferencia de los populares tras un reñido recuento en el que intervino la junta electoral.
El partido que preside Feliciano Barral, hermano de Nené, gobierna ahora el municipio de Ribadumia, de apenas 5.000 habitantes (con el apoyo del PSOE y Somos Ribadumia), el pueblo que en los últimos años ha elegido el presidente en funciones del Gobierno, Mariano Rajoy, para pasar el mes de veraneo oficial.
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