De los trapitos a los trapos sucios
Naomi Campbell comenzó su castigo social: fregar suelos durante cinco días
Naomi Campbell empezó ayer a pagar el precio de su mal humor fregando suelos en un edificio del Departamento de Sanidad en Nueva York. Ni tacones ni trapitos firmados por diseñadores de lujo, sino más bien zapatillas y trapos, pero de los de limpiar el polvo.
Campbell, de 36 años, cumple la condena de cinco días con la que un juez neoyorquino saldó la disputa entre ella y su asistente, Ana Scolavino, quien fue atacada por la modelo con un teléfono móvil en una explosión de ira hace ya un año.
Cuando la modelo llegó ayer hasta el edificio del Departamento de Sanidad Manhattan District Garage 3, la expectación de los paparazzi era total y los responsables del centro se vieron obligados a dar una minirrueda de prensa para informar de que Campbell había llegado puntual al trabajo. "Tenemos un montón de tareas para ella", dijo Albert Durrell, subsecretario de Sanidad.
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