Berlanga presenta su Ciudad de la Luz

Será una gran extensión junto al Mediterráneo, en Alicante, para más señas, y con vocación de convertirse en un centro donde se fabrique cine de referencia en Europa. Lo presentó ayer en Madrid el maestro Luis García Berlanga, que ha peleado por esta especie de sueño durante años como valenciano de pro y ha encontrado su aliado en el Gobierno de la Generalitat. Y le acompañó Eduardo Zaplana, presidente del Gobierno valenciano.

Muchos desconfían de un proyecto tan megalómano y adoptan la actitud de santo Tomás. Pero la presencia ayer en Madrid de Zaplana parecía un signo evidente de confianza. De todas formas, las cifras abruman. La inversión prevista es de 270,5 millones de euros, de los que 88,6 se invertirán en el área industrial audiovisual. El resto se destinará a una oferta complementaria de infraestructuras hoteleras y servicios que se ubicarán en el complejo.

La extensión es de 800.000 metros cuadrados, ubicados a siete kilómetros de Alicante, y la primera fase de la Ciudad de la Luz se prevé que funcione ya en la primavera de 2003, es decir, el año que viene por estas fechas. Y cuando todo se complete, la industria cinematográfica tendrá a su disposición, según los impulsores y la sociedad Ciudad de la Luz, SA, formada por la Generalitat y la empresa privada Aguamarga, integrada por profesionales del sector audiovisual, liderados por Berlanga, un total de diez platós, 8.000 metros de talleres y almacenes auxiliares, una zona acuática para producciones inspiradas en temas marítimos y un área de rodaje de exteriores de 220.000 metros, además de una escuela de formación.

Necesidades reales

Gary Bastien ha realizado el diseño arquitectónico de un parque que pretende, según Zaplana, convertirse en un punto indispensable y 'un lugar idóneo para emplazar unos estudios de producción'. Según el presidente de la Generalitat, 'la Ciudad de la Luz responde a las necesidades reales de la producción cinematográfica, un sector que crece día a día y exige niveles de calidad cada vez mayores. Y será el mayor centro audivisual de Europa'.

Por su parte, Berlanga, que pese a haber sufrido el duro golpe personal de la muerte de su hijo Carlos hace dos semanas, acudió a la presentación, ve en la Ciudad de la Luz una de las mayores ambiciones de una carrera que dio por concluida tras las cámaras con el rodaje de París-Tombuctú. 'Durante muchos años he perseguido un gran sueño, es quizá el proyecto más ambicioso de mi carrera profesional'. Y añade: 'Se convertirá en el gran angular de nuestra industria profesional'.

Berlanga recibió ayer un fuerte aplauso de los asistentes a la presentación en Madrid cuando subió a pronunciar su discurso. Fue en un acto presentado por Veronica Forqué y Miguel Bosé y en el que estaban presentes una gran cantidad de caras conocidas de la industria del cine, productores y dirigentes del sector, como el director general del Instituto de las Ciencias y Artes Audivisuales, José María Otero. El acto contó también con la presencia de Ana Botella.