La demolición de la colonia marginal Los Olivos comenzará antes de fin de año

Un año después de anunciar que lo haría, el gobierno municipal dio ayer el primer paso para la demolición y reconstrucción de la colonia Los Olivos (Latina), uno de los puntos más degradados y desatendidos de la capital. Allí malvive un millar de personas, en 329 viviendas de apenas 25 metros cuadrados "sin condiciones mínimas de habitabilidad", según admitió el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón.

La colonia, que se extiende a lo largo de cuatro calles -San Canuto, San Fulgencio, San Timoteo y San Benigno-, fue levantada en 1947 por la Dirección General de Regiones Devastadas, y es propiedad de la Empresa Municipal de la Vivienda y el Suelo (EMVS) desde 1982. Sus habitantes pagan al Ayuntamiento una renta mensual de entre 0,50 y 1,20 euros.

Ruiz-Gallardón explicó que la EMVS va a demoler todas las viviendas para reconstruir la colonia desde cero, ampliando el tamaño de las casas y creando zonas verdes y "lugares de encuentro" para los vecinos. Éstos serán realojados mientras duren las obras y después volverán a ocupar las viviendas en régimen de alquiler a 25 años.

En cuanto a los plazos, el alcalde afirmó que la demolición de los bloques comenzará "este año" y confió en que las obras hayan terminado "antes del final de esta legislatura", en 2007.

Palacio de Congresos

El gobierno municipal aprobó también la modificación del Plan General de Ordenación Urbana para levantar un nuevo Palacio de Congresos en los terrenos de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid, al norte del paseo de la Castellana. Será, con 70.000 metros cuadrados, el tercer centro de congresos de la capital y el de mayores dimensiones, por delante del que ya gestiona el Ayuntamiento en el Campo de las Naciones y del palacio de la plaza de Lima, propiedad de la Administración central.

El espacio que ocupará el nuevo Palacio de Congresos estaba en principio reservado para construir un pabellón olímpico. Pero hace meses que el gobierno municipal decidió que ese pabellón, si algún día se construye, se hará junto al estadio de La Peineta, al este de la ciudad.

Ruiz-Gallardón anunció también que en otoño comenzarán las obras de urbanización -asfaltado, colocación del alumbrado, alcantarillado, etcétera- del nuevo barrio de Valdebebas. Las obras costarán 329 millones de euros y durarán tres años. Sólo después empezarán a levantarse las 11.500 viviendas previstas.