Syd Field revela las claves del oficio de escribir películas

Durante dos días, el especialista y profesor de guiones Syd Field impartirá este fin de semana en Madrid un curso sobre la escritura de películas. Dentro del programa de la Fundación Autor y ante un aforo de 300 personas (existen 200 más en lista de espera), el profesor estadounidense abordará en el Centro Cultural de la Villa de Madrid asuntos como la creación y la construcción de personajes y la estructura y el tiempo en el guión.

"El lenguaje del cine es único. Mi trabajo es enseñar las armas de ese lenguaje, las reglas básicas para que luego cada uno pueda expresar sus ideas propias", señaló ayer Field. "El cine ha cambiado mucho, aunque en los últimos años existe, al menos en lo que al guión se refiere, un cambio muy evidente. El único problema es que, al menos en Hollywood, lo que importa no es el contenido sino la recaudación. La avaricia y el miedo son los dos motores fundamentales del cine de Hollywood"

Considerado una autoridad en la materia, profesor de guión en la Universidad de South California, en Harvard y en Stanford, Field es asesor de guión de varios grandes estudios, además de colaborador de directores como James L. Brooks, Rolland Joffe, Tony Kaye y Alfonso Cuarón. Para el curso que impartirá en Madrid, Field utilizará películas recientes para ilustrar el contenido de sus clases. De Kill Bill, El mito Bourne o Collateral a Entre copas.

"El mito Bourne [dirigida por Peter Greengrass] es un caso muy especial porque, bajo mi punto de vista, significa un giro revolucionario en la actual escritura de guiones. Una revolución provocada por las nuevas tecnologías, en las que la fusión del tiempo pasado y presente está integrada en una misma historia. El mito Bourne maneja de una manera muy excepcional la cuestión del tiempo y la memoria. Lo que parece una película de venganza, como Kill Bill, finalmente es una película sobre la redención".

"La película que ha marcado en los últimos años un giro radical en la escritura del guión fue Pulp fiction. A partir de ahí hemos llegado a algo que se puede llamar escritura multimedia", afirma Field.

Según este profesor, "una película es comportamiento, un comportamiento que se captura en imágenes. Creo que el reproche principal que se le puede hacer hoy a muchos guionistas es que olvidan esto. En muchas películas sobran explicaciones. Todo se explica demasiado".

Para Field, el futuro del cine está en los jóvenes que, con pequeñas cámaras digitales, hacen películas de bajísimo presupuesto. "Esos jóvenes inventarán vías imposibles de controlar y abrirán un camino totalmente nuevo y desconocido. El cine, como la música, no morirá, pero cambiará".

Para Syd Field, la mayoría de los 9.000 guionistas inscritos en el sindicato de escritores de cine en EE UU están mal pagados y explotados. Añade que la comedia es "de lejos" el género más difícil de escribir y que la televisión es hoy mucho más innovadora que el cine. "Es mucho más difícil entrar en el mundo de la televisión que en el del cine. Es un mundo mucho más cerrado".

Según el especialista, todos los guiones, para cine o televisión, se mueven dentro de esquemas muy parecidos: "Al final, las bases son siempre las mismas y lo importante es que funcione la historia".

"Toda película", añade, "debe tener una estructura que encaje perfectamente. Es lo que decía Jean-Luc Godard, toda película debe tener principio, nudo y desenlace. Aunque necesariamente no en ese orden".