Vuelve Cantinflas

En lo que parece ser el final de una historia que tendría mucho de cantinflesco, la justicia mexicana ha corrido el telón para que algunas de las más populares películas del cómico mexicano de Cantinflas, Mario Moreno, vuelvan a ser exhibidas. Todo tras un pleito legal de unos 30 años por la herencia del comediante, que sigue siendo una estrella.

Mario Moreno Ivanona, hijo del artista que causó sensación en México y muchos lugares del mundo a mediados del siglo pasado, asegura que la justicia le ha concedido los derechos de la difusión de 34 largometrajes de Cantinflas. Cintas como El bolero de Raquel, El profe, Su excelencia, Entrega inmediata, Un día con el diablo, El circo y Los tres mosqueteros, forman parte de este lote.

El reestreno de varias de las cintas liberadas por los tribunales al heredero de Cantinflas será durante IV Festival Internacional de Cine Contemporáneo de la Ciudad de México (Ficco 2007, del 21 de febrero al 4 de marzo), dedicado a celebrar el centenario del nacimiento del fotógrafo fallecido Gabriel Figueroa. Algunas de las películas captadas por la lente de Figueroa son El bombero atómico, Su excelencia, El profe, El bolero de Raquel, El gendarme y Ni sangre, ni arena.

"Esperamos tener invitaciones para otros festivales, tanto nacionales como internacionales, y [las películas] también se continuarán exhibiendo en las televisiones", dijo Moreno Ivanona.

Ahí está el detalle, título de una de las primeras cintas del cómico y que narra una serie de enredos en un tribunal al que Cantinflas llega equivocadamente acusado de un crimen, sirve ahora para enmarcar la victoria de su hijo en los tribunales. Tras la cual, éste dijo: "Hay muchos planes, entre ellos el reestreno en pantalla de 11 películas". Pero esto es sólo el principio, con el fin de que "el público pueda gozar y conocer este legado cultural".

Águila y sol, Sube y baja y El gendarme desconocido son filmes de Cantinflas con los que crecieron varias generaciones, pero Mario Moreno Ivanona afirma que existe otra generación que no ha podido ver en televisión varias de las cintas sobre las cuales ahora posee los derechos. El heredero se ha fijado como meta difundir lo más ampliamente posible las películas, lo que de alguna manera significará revivir la figura de su padre en México y en muchos otros lugares del mundo. Espera que los mercados de España, Francia, Marruecos, Brasil, Portugal y otros países se interesen en la exhibición de las películas.