Tres saxos tenores de lujo

Tres generaciones de saxos tenores de jazz se citarán en julio próximo en el Festival de Vitoria en una 36ª edición que se empieza a llenar de atractivos. Como si quisiera sumarse a engalanar la capital alavesa en su año más verde e internacional, la organización del Jazzaldia anunció ayer que pasarán por Mendizorrotza tres de los más sobresalientes intérpretes -los tres estadounidenses- de un instrumento definitorio en el jazz: Joe Lovano, Joshua Redman y, sobre todo, Sonny Rollins. Todos ellos ya han tocado en ocasiones anteriores en el festival, pero nunca habían coincidido en la misma edición.

Lovano (Cleveland, 1952) abrirá el fuego el 17 de julio, tercer día de la muestra, al frente de Sound Prints, el quinteto que encabeza junto al trompetista Dave Douglas. Lovano, que comenzó su carrera a mediados de los setenta, ya pasó por el festival vitoriano en 2007, entonces como invitado especial del Niño Josele. A lo largo de estas tres décadas ha encabezado formaciones diversas como el trío que formó con Paul Motian y Bill Frisell o el quinteto que colideró con John Scofield. Uno de sus últimos discos, Us Five, fue nominado el pasado mes de noviembre al Grammy al Mejor Álbum de Jazz Instrumental.

Rollins actuará en el verano de 2012 solo en tres lugares de toda Europa

Al día siguiente, actuará Redman (Berkeley, 1969) junto al trío de jazz contemporáneo The Bad Plus. Hijo del también gran saxo tenor Dewey Redman, ha actuado o grabado con grandes del estilo como Pat Metheny, Elvin Jones o Chick Corea. Redman repite por segundo año consecutivo. En la pasada edición le acompañó una doble base rítmica con dos baterías y dos contrabajos.

Pero el gran nombre, que cerrará la muestra el 21 de julio, es el de Sonny Rollins. A sus 81 años, el músico neoyorquino encarna como nadie hoy en día toda la mitología del jazz. El sobrenombre por el que es más conocido, Saxophone Colossus -de innecesaria traducción-, no solo alude a uno de sus discos más emblemáticos, editado en 1956, sino que define bien a las claras su papel en este género.

Rollins ofrecerá un concierto exclusivo en España y uno de los tres únicos que dará en Europa el próximo verano. Su último paso por Vitoria se remonta a 2008. Entonces cautivó a todos los que tuvieron la fortuna de escucharle en un concierto que el crítico Chema García Martínez calificó en este periódico con un único, pero muy definitorio adjetivo: "Apabullante".