Portazo al 'cara a cara' Mas-Montilla

No habrá hoy debate entre los dos principales candidatos a la presidencia de la Generalitat. La Junta Electoral Central ha rechazado a última hora el cara a cara entre José Montilla y Artur Mas que debía celebrarse esta noche en TV3, al considerar que no se había solicitado el debate en los plazos legales previstos. CNN+ ha ofrecido a los jefes de campaña de CiU y del PSC celebrar el debate en catalán y a nivel nacional, después de que la Junta Electoral Provincial de Barcelona decidiera por unanimidad no autorizar el debate entre Mas y Montilla.

EL PSC acusa a Artur Mas de haber impedido desde el inicio que se hicieran debates por su negativa a que se realizararán dos, uno en catalán y otro en castellano. Por su parte, CiU carga contra José Montilla, a quien acusan de haberse levantado de la mesa de negociaciones hace un mes y haberse negado a pactar los términos del debate.

Minutos después de conocerse la decisión de la Junta Electoral, José Montilla lamentó la decisión, y manifestó sentirse "muy decepcionado" de que el cara a cara debate no pueda llevarse a cabo, algo que ha achacado tanto al "formalismo" de la Junta Electoral como al "partidismo" de Mas, que "ha rechazado celebrar un cara a cara en las 23 ocasiones en las que el PSC se lo ha propuesto", ha remarcado. En la formación nacionalista han rebajado el tono después de que por la mañana Artur Mas dijera que el candidato del PSC esperó hasta este domingo para desencallar el cara a cara a sabiendas de que sería inviable. Tras la anulación del debate, el director de campaña del CiU ha asegurado que "no es momento de reproches ni de meter el dedo en el ojo. El PSC quería hacer este debate. CiU también, sin duda, pero no ha podido ser".

La Junta de Barcelona trasladó anoche una consulta al máximo órgano arbitral electoral para preguntar si el cara a cara convocado para esta misma noche en TV-3 podía celebrarse, pese a no ajustarse a una instrucción dictada por la JEC en 1999 que obliga a comunicar con cinco días de antelación este tipo de convocatorias.

La JEC indica en su escrito a la Junta de Barcelona "que es competencia suya resolver sobre la cuestión planteada, como por otra parte ha venido haciendo hasta la fecha". Y añade: "Todo ello sin perjuicio de los eventuales recursos que pudieran presentarse ante la Junta Electoral Central contra los acuerdos de la Junta Electoral Provincial de Barcelona".

Anuncio con cinco días de antelación

Alicia Sánchez-Camacho (PP), Joan Puigcercós (ERC) y Albert Rivera (Ciutadans) impugnaron ayer el cara a cara ante la Junta Electoral Provincial porque incumple la normativa de anunciar con cinco días de antelación la celebración de un debate y porque se debería de compensar a los partidos pequeños. Sin embargo, un auto del Tribunal Supremo rechazó en 2008 la petición de CiU y PNV de solicitar la suspensión cautelar de un debate entre Zapatero y Rajoy.

Artur Mas, candidato de CiU, ha expresado su incomodidad por tener que supeditar su agenda a la decisión de la Junta Electoral Central. Tras presentar su programa sobre seguridad, en un histórico hotel del centro de Barcelona, Mas ha culpado al socialista José Montilla de la situación. "Si hubiese aceptado el debate en catalán hace 15 días, que era lo que nosotros queríamos, esto no pasaría. Hacer las cosas bien cuesta poco. Y este es el precio de hacerlas mal", ha afirmado.

El candidato nacionalista, que ha cancelado su presencia en el mitin que tenía programado para esta noche en Lleida, ha lamentado que PP, ERC y Ciutadans hayan recurrido el cara a cara. "En cambio, no apelaron al debate entre Rajoy y Zapatero de 2008. Allí (en Madrid) sí lo quieren hacer y aquí no", afirmó. CiU sí recurrió en su día el espacio, aunque Mas ha señalado que hay una diferencia sustancial: en las elecciones generales no hubo debate entre todos los candidatos con representación parlamentaria -Duran i Lleida no pudo debatir con Zapatero y Rajoy- y en las catalanas sí.

Reproches a Montilla

En su intervención, Mas ha reprochado a Montilla la forma en que planteó el debate del pasado domingo: "En lugar de aprovechar su intervención para dirigirse al pueblo de Cataluña, pretendía que yo quedara descolocado. Por eso apliqué el sentido común para hacerlo en ese momento. Eso si que es austeridad, porque teníamos el plató y el moderador. Pero no quiso de ninguna manera".

CiU ha avisado que ya se están acabando los días de campaña y que quedan pocas posibilidades de celebrar el debate: "Nosotros recurriremos, pero hubiera querido estar hoy en Lleida y mañana tengo que ir a Girona y el jueves a Tarragona. Esa es nuestra responsabilidad".