Los médicos piden comprensión por la huelga convocada el 15 y 16

Al recorte de medios que padecen los hospitales de la sanidad pública catalana por los ajustes de la Generalitat se le sumará este martes y miércoles el efecto de la huelga de médicos convocada para los próximos 15 y 16 de noviembre. Conscientes de la precaria situación que sufrirán los centros sanitarios durante estos días, el sindicato Médicos de Cataluña ha pedido hoy "comprensión" a los pacientes por los efectos del paro en una carta abierta a la ciudadanía. La misiva lamenta las consecuencias de la protesta, pero justifica que el paro "obedece a un acto de responsabilidad" para mantener la calidad de la sanidad pública "ante el deterioro provocado por los recortes". El sindicato responde así a las criticas del Gobierno catalán, que la semana pasada tachó la huelga de "irresponsable" por los perjuicios que causará a los pacientes de los centros sanitarios.

El sindicato, mayoritario entre los facultativos de la sanidad pública catalana, ha rechazado estas acusaciones para defender que el colectivo médico está formado por "profesionales vocacionales" y que cualquier actuación que pueda afectar a los pacientes es contraria al deber y a la ética de los facultativos. "Nos vemos obligados a salir en defensa de la sanidad pública universal, equitativa y de calidad" ante las medidas de austeridad que afectan "de forma seria" a los servicios sanitarios, añaden. El sindicato asegura que la responsabilidad de los perjuicios causados a los pacientes es en realidad el Gobierno catalán por haber ordenado "el cierre de camas, quirófanos, plantas hospitalarias y urgencias nocturnas de centros de atención primaria", señala en relación a los recortes. En esta línea, los médicos defienden que reclaman "única y exclusivamente" poder ofrecer el mejor servicio sanitario, con el tiempo y los recursos imprescindibles.

Atención médica ante cualquier urgencia

El colectivo garantiza por otro lado que durante los dos días de huelga los médicos atenderán cualquier situación urgente, tanto en la atención primaria como en los hospitales, donde se mantendrán las guardias, visitas a enfermos hospitalizados y, por supuesto, los procesos oncológicos. "Somos responsables y aceptamos unos servicios mínimos amplios que garanticen la atención médica ante cualquier situación urgente".

Los objetivos de la huelga, han defendido, pasan por la recuperación del presupuesto sanitario previo a los recortes, así como la actividad, los recursos y la plantilla también anteriores al tijeretazo del 10% aplicado por el Departamento de Salud que dirige el consejero Boi Ruiz. Tras apenas 10 meses de recortes aplicados por la Generalitat de CiU, los hospitales públicos se han visto forzados a reducir su actividad a niveles mínimos: las operaciones quirúrgicas han caído entre el 30% y el 40%, y la lista de espera aumentó el 23% hasta junio, última cifra oficial, que no incluye el efecto del cierre de quirófanos aplicado a partir de verano.

El porcentaje de pacientes en lista de espera en los ocho grandes centros de propiedad pública, ha añadido el sindicato, se han situado en el 51%. "Nuestra voluntad es salvar la sanidad pública", ha insistido Médicos de Cataluña, que ha alertado de que reducir más el personal sanitario convertirá en inviable el funcionamiento de algunos hospitales.

División sindical ante el paro

El efecto de los recortes, sin embargo, no ha logrado forjar la unión sindical. Los dirigentes de UGT se han mostrado comprensivos ante la huelga pese a lamentar que los médicos no consultaran la medida previamente con otras uniones sindicales. CC OO ha ido más allá: el sindicato mayoritario entre el personal sanitario no facultativo ha criticado que Médicos de Cataluña actúa de forma "irresponsable" porque solo aspira a "mantener privilegios".

Este rechazo ilustra la tensión que los recortes provocan también en el seno del sector sanitario: el personal no médico se considera el gran perjudicado por los recortes y se siente molesto por la indiferencia que los médicos habían mostrado hasta ahora. "No son solidarios con el resto de personal sanitario", ha resumido un portavoz de CC OO.