Carlsen pide cambios en el ritmo de juego tras firmar el tercer empate
El noruego neutraliza con las piezas negras sin mayor problema la iniciativa de Niepómniachi en el duelo de Dubái
El campeón del mundo propone que las partidas del duelo por el título sean a un ritmo más rápido, para que crezca la probabilidad de errores, y por tanto se reduzcan los empates. Magnus Carlsen firmó este domingo el tercero consecutivo en el duelo que disputa frente al ruso Ian Niepómniachi en la Expo Universal de Dubái (Emiratos Árabes Unidos), previsto al mejor de 14 partidas. La siguiente tendrá lugar el martes, desde las 13.30 (hora peninsular española).
“Esto es un debate entre el deporte y la ciencia. O se acelera el ritmo actual [cada jugador dispone de dos horas para los primero...
El campeón del mundo propone que las partidas del duelo por el título sean a un ritmo más rápido, para que crezca la probabilidad de errores, y por tanto se reduzcan los empates. Magnus Carlsen firmó este domingo el tercero consecutivo en el duelo que disputa frente al ruso Ian Niepómniachi en la Expo Universal de Dubái (Emiratos Árabes Unidos), previsto al mejor de 14 partidas. La siguiente tendrá lugar el martes, desde las 13.30 (hora peninsular española).
“Esto es un debate entre el deporte y la ciencia. O se acelera el ritmo actual [cada jugador dispone de dos horas para los primeros 40 movimientos] o el duelo se convierte en una combinación de las modalidades lenta y rápida [menos de media hora para toda la partida]”, propuso Carlsen en la conferencia de prensa cuando le preguntaron si se puede hacer algo para reducir el grandísimo porcentaje de empates en los últimos duelos por el título, que Carlsen ganó en los desempates rápidos. Nueva York 2016, frente al ruso Serguéi Kariakin: una victoria para cada uno y 10 empates. Londres 2018, ante el estadounidense Fabiano Caruana: las 12 partidas terminaron en tablas.
Niepómniachi no propuso alternativa alguna al formato actual, pero sí explicó lo que, en su opinión, causa tantos empates: “Para que se reduzca su número, tienen que cometerse errores. Y el entrenamiento con computadoras muy potentes produce la tendencia a menos errores. Por tanto, el ajedrez actual del máximo nivel tiende al empate más que nunca”. El principal matiz que se puede añadir a esas palabras es que también influye mucho la disposición del jugador a correr riesgos. La gran mayoría de los miembros de la élite tienden a evitarlos.
El tercer empate de este duelo no estuvo exento de interés —poco que ver con algunos, realmente soporíferos, de los dos duelos anteriores—, y probablemente agradó a los espectadores especiales que ocupaban uno de los sectores del anfiteatro del Dubái Exhibition Center, sede del Mundial dentro de la Expo, desde hora y cuarto antes del comienzo. Eran el centenar de participantes en el Torneo Mundial Escolar, que organiza España. Entre ellos hay al menos dos cuyos resultados les perfilan ya como posibles aspirantes al título que ostenta ahora Carlsen en un futuro no muy lejano: los indios Rameshbabu Praggnanandhaa, de 16 años, y Dommaraju Gukesh, de 16, cuyo equipo, el Velammal, disputa la final este jueves con el Saco Oliveros de Perú.
Lo ocurrido durante unas tres horas se resume en que Niepómniachi repitió la Apertura Española de la primera partida, Carlsen amagó de nuevo con el Gambito Marshall, el ruso lo evitó y el noruego fue muy preciso para igualar sin apenas sufrir. Luego ambos pasaron el control antidopaje —la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) es miembro del Comité Olímpico Internacional desde 1999— y Carlsen anunció que después iba a darse un atracón de fútbol (incluido el Real Madrid – Sevilla) y NBA.
Para terminar la conferencia de prensa, el presentador le pasó una pregunta proveniente de las redes sociales. ¿Cómo le gustaría que le recordasen dentro de 50 años? “Como alguien que por fin ganó una partida en un Campeonato del Mundo desde 2016″.
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