Jaime Santos sale del ataúd, elimina al 4º del mundo y reta al pentacampeón Anand
El ídolo leonés gana los dos últimos asaltos a Erigaisi tras empatar el primero y perder el segundo
Aunque las máquinas han cambiado el ajedrez más que ningún otro deporte, los jugadores siguen siendo humanos, y cometen los errores propios de su especie. Como los de Arjun Erigaisi, 4º del mundo, eliminado (1,5-2,5) por Jaime Santos en la 2ª semifinal del XXXVII Magistral Ciudad de León tras tener contra las cuerdas al ídolo leonés un par de horas antes. Santos, vencedor en la edición de 2023, disputará la final este domingo contra el pentacampeón del mundo, también indio, Viswanathan Anand, 11º del mundo a los 54 años, quien busca su 10ª victoria en León.
En una conversación con EL PAÍS mientras sus admiradores lo aclamaban, Santos se mostró muy modesto ante la pregunta de cómo había logrado resucitar y vencer al 4º del mundo: “Bueno, en el momento clave, cuando él ha rechazado las tablas en la 3ª partida y ha jugado a ganar, es verdad que he logrado hacer una serie de jugadas únicas con 40 segundos en el reloj. Pero no eran tan difíciles”.
A Santos le faltó colmillo en el primer asalto cuando, con las piezas blancas, logró una posición muy ventajosa, que no supo rematar. Erigaisi dijo después entre bastidores, tras la firma del empate que 29 Cxd6 hubiera dado “una posición ganadora” al español. Pero los análisis efectuados en la sala de prensa indican que eso no está claro. Tal vez en el lance anterior, con 28 Cd5 en lugar de 28 Ce4, Santos hubiera situado al indio contra las cuerdas y con muchas probabilidades de ganar.
Quizá por esa frustración en el subconsciente, el ídolo leonés jugó francamente mal la segunda partida, y poco menos que regaló el punto a Erigaisi tras sólo 30 lances, aunque estaba ya perdido desde el vigésimo. Su entrenador desde niño -y director de la organización del torneo-, Marcelino Sión, fue al camerino de su pupilo a insuflar ánimo, pero la situación era muy delicada, no sólo en el marcador sino sobre todo en la mente del brillante vencedor de la edición de 2023.
Las cosas no pintaban nada bien para él en el tercer asalto. Impotente para doblegar la resistencia de su rival, pero con la suficiente serenidad para no perder la cabeza, Santos ofreció tablas de hecho por medio de repetir jugadas, resignándose a tener que ganar el último asalto con las piezas negras para forzar el desempate relámpago.
Pero hete aquí que Erigaisi quiso triunfar a lo grande, y evitó la repetición. La posición resultante en el tablero era más o menos equilibrada, pero la clave estaba en el reloj: un minuto para el leonés y once para el indio. Sin embargo, ocurrió lo contrario a la lógica: Erigaisi se bloqueó al ver que su contrincante era capaz de hacer una serie de jugadas precisas con tan poco tiempo. El cazador cazado. Santos salió triunfante del ataúd e igualó el marcador.
Pero la situación seguía siendo, en teoría, favorable para el portento asiático, por dos razones: es el 4º del mundo a los 20 años y tenía la iniciativa de las piezas blancas en el cuarto asalto. Y, en efecto, Erigaisi parecía muy seguro de sí mismo cuando, en su vigésimo lance, sacrificó material para atacar al rey.
Sin embargo, volvió a ocurrir lo más inesperado. Con un semblante más propio de quien desea echar una siesta, y no de un deportista en situación de extrema tensión, Santos ejecutó una larga serie de jugadas defensivas muy precisas y fue adquiriendo ventaja en el reloj. Hasta que el indio, probablemente asombrado por la férrea resistencia de su rival, fue impreciso y quedó técnicamente perdido. Ahora sí, el héroe local no pudo disimular una sonrisa y ejecutó su ventaja sin piedad hasta que el público rompió en un gran aplauso cuando Erigaisi se rindió. Y luego el indio resumió: “Ha sido un duelo muy duro, en el que yo he fallado en los momentos decisivos”.
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