¿Es positivo dejar que un menor comparta la cama con su perro o gato? Sí, pero en un contexto que garantice la seguridad y el bienestar de ambas partes, teniendo en cuenta factores como la disponibilidad del adulto para supervisar, el estado de salud del pequeño y su animal o la relación entre los dos
Los miedos irracionales e intensos pueden llegar a interferir en la rutina vital de los menores, además de provocarles ansiedad. La regla de oro para que los padres les protejan de ellas es no hablar delante de sus hijos sobre sus propios temores
Lo que para un adulto es solo un disfraz, para un menor supone la visión real de uno de sus miedos más profundos. Las historias y personajes que rodean esta fiesta y el Día de Todos los Santos puede influir en la calidad de su sueño, fomentando pesadillas y terrores nocturnos
Los progenitores que siguen este estilo de crianza consideran a los niños seres independientes y les aceptan con sus habilidades, talentos y dificultades, aunque también saben poner límites sin autoritarismo
La superación de una ruptura implica tiempo y aceptación de las emociones. Compartir con personas de confianza lo que se siente, crear nuevas rutinas y recuperar lo que se sacrificó por la convivencia ayuda a abrirse a nuevas experiencias y oportunidades
El estado anímico de los canes viene determinado por el ambiente, la educación, la genética, las experiencias y su personalidad, pero algunos de los factores que más les afectan son la soledad y la enfermedad
Desde 2016, Cruz Roja desarrolla en Galicia una iniciativa que trabaja aspectos de los cuidados que pueden ser percibidos como obstáculos debido a la brecha generacional, desde la manera de comunicarse con los jóvenes al manejo de las tecnologías
Jugar, entrenar su instinto depredador, hacer escapadas nocturnas y trastadas son algunas de las actividades de los mininos cuando no tienen compañía. Pero no hay que olvidar que son animales sociales y sociables, por lo que hay que enriquecer su entorno que no estén todo el día durmiendo
Asumir el rol de padre y madre en el cuidado de los niños implica mucho trabajo para el pariente que asume la situación. Establecer rutinas, tener en cuenta el autocuidado y fomentar la comunicación para hablar con menores son tres puntos para conseguir una convivencia óptima
Lobos y canes comparten un 98,5% de ADN, pero las diferencias entre un chiguagua y su ancestro salvaje son evidentes. La selección genética, que ha dado lugar a más de 400 razas caninas, ha creado una gran distancia entre ambas especies, pero todavía mantienen algunas similitudes, como su instinto gregario
Es importante distinguir entre desajustes del proceso de maduración del menor, que se resolverán de forma natural, y circunstancias que sí precisan de ayuda especializada, como las alteraciones en la conducta alimentaria. Luego habrá que valorar la necesidad de una terapia más familiar o cuánto tiempo se debe prolongar
Lejos de ser una situación preocupante, los soliloquios infantiles son un campo abonado para el desarrollo del lenguaje, la imaginación y la expresión del mundo interno
Que los progenitores expresen opiniones diferentes desde el respeto y el espíritu crítico es un buen modelo para los niños, que pueden aprender así a gestionar y solucionar conflictos
Los niños dicen “me aburro” como reflejo de los adultos y de su intolerancia al no hacer nada. Sin embargo, conviene que los más pequeños aprendan a gestionar su tiempo libre para que lo puedan disfrutar y busquen por sí mismos actividades que no estén estructuradas por los progenitores
El temor a la oscuridad o a estar solos son las causas más habituales por las que los menores pueden ser reticentes a ir a la cama por las noches. Pero también influyen los genes, sus vivencias diurnas, el mal uso de las pantallas o una inadecuada rutina del sueño
El can entró en nuestros hogares hace 33.000 años y, desde entonces, se ha adaptado con gran habilidad. Pero su naturaleza necesita ser expresada también en el ámbito doméstico, para que estos animales estén sanos y felices y no desarrollen fobias, agresividad, ansiedad por separación o embarazos psicológicos
Para que un can se muestre receptivo a bañarse en el mar, río o piscina, conviene no obligarle a nadar y, por su seguridad, vigilarle siempre y buscar zonas seguras, como los lugares sin corrientes y que tengan agua a una temperatura templada. Estos son algunos consejos a tener en cuenta
Los jóvenes tienen planes, gustos y horarios diferentes a los de sus padres, pero es posible conseguir pasar tiempo juntos si se planifica con antelación y se pactan alternativas, como que se venga un amigo con ellos o que lleguen días más tarde al lugar de veraneo
El vínculo de aprecio y cariño de un can hacia su dueño se desarrolla si se siente amado. Para que suceda, el animal se tiene que sentir comprendido, atendido y respetado. De otra manera, será una relación basada en el miedo y la supervivencia
Los hábitos bien planteados aportan a los menores una sensación de seguridad porque ayudan a estructurar su día a día. Por el contrario, su ausencia puede provocar inquietud, cambios de humor y falta de autonomía. La clave reside en aplicarlos con paciencia, flexibilidad y constancia
Los índices de los accidentes en el agua más elevados corresponden a los niños de 1 a 4 años, y es debido a la desatención de sus cuidadores. Que sepan nadar no es suficiente, es necesario que desarrollen destrezas básicas acuáticas
¿Dónde llevar a los niños durante sus largas vacaciones? Es la gran pregunta que se repiten la mayoría de padres todos los años. Lejos de que sea una decisión aislada de la opinión del menor, conviene tener en cuenta sus gustos y su edad, para valorar si está preparado para ir de campamento y dormir fuera de casa
Picaduras, insolación, intoxicaciones o deshidratación son algunos de los peligros para las mascotas durante el estío. La prevención es la mejor herramienta para evitar sustos en la época de calor, y unos primeros auxilios adecuados pueden salvar la situación hasta que se llega al veterinario
Los mininos son depredadores que tienden a ocultar la enfermedad como un comportamiento adaptativo para preservar su supervivencia, pero el acicalamiento excesivo, la falta de apetito, la inactividad o los cambios de comportamiento son signos que alertan que no se encuentran bien
La dieta mediterránea y los lácteos funcionales, como los yogures o la leche enriquecida, son la mejor opción para los pequeños a partir de los seis meses de edad. No obstante, con los de elaboración industrial conviene ser selectivo y mirar los ingredientes para comprobar que no contengan un exceso de azúcar o de grasa
La tensión emocional de los progenitores transmite a los menores la sensación de un entorno inseguro y amenazante, pudiendo afectar a su desarrollo cognitivo, su autoestima o sus habilidades sociales
Los niños buscan refugio en sus progenitores para sentirse protegidos y calmados. A pesar de la creencia de que sostenerlos en exceso les puede malacostumbrar, es un acto de apego que necesitan para su desarrollo, sobre todo, cuando son bebés
Es fundamental completar el duelo por la pérdida de un animal para crear un vínculo sano con otro, desde donde no se pretenda sustituir al que falleció. Además, conviene huir de la toma de decisiones prematuras que pretenden evitar sentir el vacío y el dolor
Lejos de vetar las gominolas, conviene incluirlas en la dieta de forma controlada para que los niños no se obsesionen con ellas y aprendan a consumirlas con moderación
La convivencia entre personas y animales genera una relación única, entre otras cosas, porque se convierten en confidentes de las preocupaciones y no juzgan a sus tutores. Pero para que esta magia se produzca debe existir respeto hacia ellos y se tienen que sentir queridos
Cuando un menor hurta suele ser porque no controla sus impulsos, tiene baja tolerancia a la frustración o incluso aún no tiene consciencia de lo que representa ese acto y sus consecuencias. Fomentar el respeto hacia las cosas ajenas o evitar su humillación puede ayudar a superar esas acciones
Existen varias señales de que un can ha desarrollado hipersensibilidad al polen o a determinados alimentos. Detectar e identificar los alérgenos de forma precoz garantiza la recuperación de la salud y la calidad de vida del animal
Algunos progenitores sufren estrés crónico porque nunca se priorizan ni encuentran su propio espacio para descansar. Esto les provoca un estado permanente de insatisfacción y cansancio que deteriora el vínculo familiar
Los canes mayores pierden masa muscular, tienen menos resistencia a las infecciones y suelen desarrollar artrosis. Para garantizar su calidad de vida conviene que tengan una dieta específica para su edad, que hagan ejercicio moderado y que estén bien hidratados
Falta de habilidades sociales, mal uso de las redes sociales o miedo son situaciones que pueden provocar que un joven carezca de amistades. Frente a esta situación, lo que mejor aportan los progenitores es una vida social sana y diversa desde la infancia y una escucha sin juicios
Los felinos tienden a convivir mejor con las especies de tamaño similar, ya que debido a su instinto cazador consideran presas potenciales a los más pequeños, como roedores o aves. Para evitar problemas en casa es aconsejable que los primeros encuentros resulten satisfactorios
Manipular, dividir o desacreditar a los hijos son algunas actitudes de los mayores que pueden afectar a la autoestima del nieto y crearle confusión a la hora de saber qué pautas de los adultos acatar. Para evitarlo conviene dejar claro cuál es su rol y los límites que no se deben traspasar
Los canes también tienen pesadillas y pueden padecer insomnio. Durante su actividad onírica, que varía según el tamaño del animal, recuerdan experiencias de su vigilia, que se pueden traducir en movimientos corporales y expresiones vocales
El sobrepeso y el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares son algunas de las consecuencias de la ingesta de ‘fast food’. Establecer prácticas alimentarias saludables en la infancia y adolescencia es crucial para la salud del futuro
El gato doméstico es el único felino que ronronea en la interacción con los humanos, y así puede expresar felicidad, dolor o hambre. Es un tipo de comunicación que se desarrolló con la domesticación y que produce una emoción positiva en la persona que lo recibe