Fortes, operado de una cornada en el cuello que llega hasta el cráneo

El torero Saúl Jiménez Fortes salió a las tres de la madrugada del quirófano del hospital Clínico de Salamanca después de cuatro horas de intervención de una cornada "muy grave" en el cuello que llega hasta la base del cráneo, informó a Efe su apoderado, Nemesio Matías. El diestro malagueño ha sido ingresado en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) de este mismo complejo hospitalario de la capital salmantina, donde deberá pasar varios días, ha añadido su representante, quien ha vuelto a insistir que la cornada es "muy fuerte" y ha ocasionado "mucho daño".

"El pitón entró por debajo de la barbilla y le ha afectado gravemente la lengua, la región nasal y destroza el paladar, además de llegarle hasta la base del cráneo. Es una cornada tremenda, pero ahora solo nos queda esperar, ya que no hay parte médico y solo sabemos que lo llevan a la UVI", manifestó. Visiblemente afectado por su tono de voz al teléfono, Matías indicó por último que, aunque los médicos han dicho que está fuera de peligro, "hay que esperar varios días más para ver el alcance real de la herida y sus posibles secuelas".

Fortes resultó cogido al recibir de rodillas con el capote a su primer toro, de la ganadería de Orive, del festejo celebrado ayer en la localidad salmantina de Vitigudino. El astado le arrolló contra las tablas, metiéndole el pitón por el cuello, levantándolo hacia arriba y provocando una importante hemorragia. El torero fue estabilizado en la enfermería de la plaza, y fue trasladado de urgencia a Salamanca, donde fue intervenido desde las 22.30 hasta casi las tres de la madrugada.

No es la primera vez que este torero sufre un percance de este tipo. El pasado 14 de mayo, en plena feria de San Isidro, resultó dramáticamente corneado por su segundo toro en la parte derecha del cuello. Los médicos le apreciaron dos heridas, una en la región cervical derecha con trayectoria ascendente y hacia dentro de 15 centímetros, y otra, de 10 centímetros, en la región submandibular izquierda. El pronóstico fue muy grave.

Ya entonces, el cirujano jefe de la plaza de Las Ventas, Máximo García Padrós, aseguró que el torero malagueño había tenido mucha suerte. "Dos centímetros más y no lo cuenta", añadió. Sin embargo, solo ocho días más tarde recibió el alta y reapareció el 25 de junio en la feria de Badajoz.