Mariano Barroso: “Las salas de cine son un lugar seguro”
El presidente de la Academia de Cine analiza con los suscriptores del diario el presente y el futuro del cine español
La crisis del coronavirus ha tocado de lleno a la industria cinematográfica, que se ha visto obligada a cerrar las salas e interrumpir rodajes durante el confinamiento. El sector atraviesa un momento especialmente delicado y, con la llegada de la nueva normalidad, los profesionales reivindican las salas como un lugar seguro y buscan nuevas películas con las que ir recuperando poco a poco la afluencia a los cines españoles.
El presidente de la Academia de Cine, ...
La crisis del coronavirus ha tocado de lleno a la industria cinematográfica, que se ha visto obligada a cerrar las salas e interrumpir rodajes durante el confinamiento. El sector atraviesa un momento especialmente delicado y, con la llegada de la nueva normalidad, los profesionales reivindican las salas como un lugar seguro y buscan nuevas películas con las que ir recuperando poco a poco la afluencia a los cines españoles.
El presidente de la Academia de Cine, Mariano Barroso, ha compartido sus reflexiones sobre esta situación con los suscriptores de EL PAÍS, en un encuentro virtual enmarcado dentro del programa de experiencias exclusivas EL PAÍS+. El periodista del diario Gregorio Belinchón moderó este encuentro, en el que los lectores pudieron preguntar sus dudas al director.
La celebración de este encuentro coincide con la fecha del estreno de Padre no hay más que uno 2: la llegada de la suegra. La película de Santiago Segura, que tenía previsto llegar a las salas el 7 de agosto, adelantó su estreno al pasado 29 de julio, con el objetivo de salvar la taquilla española. Su éxito ha servido de aliento a las salas: según datos de Comscore, desde su estreno, la película ha superado los dos millones de euros de recaudación, convirtiéndose en la mejor apertura del año de una película española.
Barroso celebra la decisión de Segura y asegura que ha servido para desbloquear la situación a la que se enfrentaba el sector: “Las majors americanas no estrenaban sus películas porque la gente no iba al cine y los espectadores no iban porque no encontraban cine de estreno”. El director considera que se trata de un buen momento para impulsar el cine nacional: “Santiago se arriesgó y sabía que había hueco para él. Le admiro y aplaudo su valentía”.
Para Barroso es importante insistir en que “las salas de cine son un lugar seguro” y recuperar el encuentro con la gran pantalla. El realizador no teme que la asistencia baje debido al consumo de las plataformas de streaming durante el confinamiento: “Se está acelerando todo el proceso de digitalización. A pesar de ello, me parece que hay unas costumbres que son irrenunciables. Hay un público siempre necesitado de ir a las salas, como existe un público específico para esta forma de consumo en línea, como los habitantes de lugares donde las salas de cine han ido desapareciendo”.
La digitalización también ha llegado a la gala de los Premios Goya. La próxima edición se celebrará el 27 de febrero, en el Teatro del Soho CaixaBank de Málaga y contará con conexiones e intervenciones desde varias ciudades españolas para cumplir con las restricciones de aforo del teatro. “Este año no queríamos hacer una gran gala, vestirse y compartir alegrías. Había que hacer una gala responsable”, explica Barroso.