El triunfo de ‘El poder del perro’ en los premios de este fin de semana lanza al wéstern de Jane Campion hacia los Oscar
Tras ganar en los Bafta británicos, en los galardones del sindicato de directores y en los Critics Choice, la película de Netflix solo parece tener una rival: ‘CODA’
El triunfo hace 15 días de CODA, de Sian Heder, en los galardones del Sindicato de Actores, incluyó a un nuevo rival en la carrera a los Oscar, que se entregarán el próximo 27 de marzo. Lo que parecía un duelo entre El poder del perro, de Jane Campion, y...
El triunfo hace 15 días de CODA, de Sian Heder, en los galardones del Sindicato de Actores, incluyó a un nuevo rival en la carrera a los Oscar, que se entregarán el próximo 27 de marzo. Lo que parecía un duelo entre El poder del perro, de Jane Campion, y Belfast, de Kenneth Branagh, se abrió a un tercer filme, ganador en Sundance, pero aparentemente con menos peso que los dos primeros. El fin de semana ha dejado claro, después de tres galas de premios, que Belfast ha quedado eliminada, y que CODA se queda atrás: solo el mensaje de buenrrollismo, de feel good movie, podría arrastrar a los votantes de la Academia de Hollywood a elegirla. Es decir, sería el Green Book de 2022. Y se repetiría lo ocurrido en 2019: a un drama de Netflix, en aquella ocasión Roma, de Alfonso Cuarón, le derrota en el Oscar a mejor película un filme de tono medido, con cierto mensaje social y pensado para el gran público. Ahora bien, enfrente está El poder del perro y 2022 no es 2019.
El viernes Jane Campion y su El poder del perro ganó en los premios del sindicato de directores, los DGA. Aunque se les llame sindicato, en realidad son gremios, y todos los oficios del cine tienen sus propios galardones. Pero para el Oscar a mejor película hay que fijarse en los de los Actores (SAG), los DGA y los de los productores, que se entregan el próximo sábado 19. En los DGA, por primera vez ganaron dos mujeres en el apartado fílmico: Campion en mejor dirección y Maggie Gyllenhaal en mejor dirección novel con La hija oscura. En cambio, en los SAG ganó su trofeo principal, el de mejor trabajo de un reparto, CODA. El poder del perro ni siquiera era candidata. Y los actores son el grupo de votantes más numeroso en la Academia de Hollywood. Ayer domingo, El poder del perro se llevó todo lo posible, en los Bafta y en los Critics Choice. La coincidencia de fecha (y solo separados por pocas horas) hizo que pocas estrellas estuvieran en Londres y prefirieran quedarse en Los Ángeles para seguir con la promoción del Oscar.
En los Bafta, El poder del perro obtuvo mejor película y mejor dirección: Jane Campion, que se convirtió en la tercera mujer en la historia en ganar el Bafta a mejor dirección (tras Chloé Zhao, por Nomadland, y Kathryn Bigelow, por En tierra hostil). Se les escaparon el resto de premios, sobre todo el de mejor guion adaptado, que fue para Sian Heder por CODA, y eso la mantiene en la competición. Belfast, de Kenneth Branagh, logró únicamente el de mejor película británica.
En los Critics Choice El poder del perro ganó película, dirección, fotografía y guion secundario. Estos premios, que han llegado a su 27ª edición, son votados por 250 críticos de cine, radio y televisión, agrupados en la Broadcast Film Critics Association. ¿Son relevantes? Pues igual que los Globos de Oro: gracias a que su gala es televisada. Es más, los Critics Choice han hecho todo lo posible por convertirse por ruido mediático en los nuevos Globos de Oro. Ellos dan también premio a la mejor comedia (para Licorice Pizza, de Paul Thomas Anderson) y mejor reparto (para Belfast).
Así pues, todo queda entre CODA y El poder del perro. Pero 2022 no es 2019. Una cuarta parte de los académicos de los Oscar reside fuera de EE UU, y son votantes muy activos: no hay más que fijarse en los triunfos de Parásitos, del surcoreano Bong Joon-Ho (la única película en lengua no inglesa en llevarse el premio principal), y Nomadland, de Chloé Zhao, en las últimas dos ediciones. Y por como ha ido la temporada de galardones, El poder del perro podría recibir su apoyo, mientras que CODA —siglas de Child of Deaf Adults (traducible como “hijo de padres sordos”)— sería más apreciada por los estadounidenses. Eso sí, si gana esta versión del filme francés de 2014, en Netflix se enfadarán y mucho. Se les habrá vuelto a escapar el Oscar principal, esta vez a manos de Apple TV, que compró CODA por casi 25 millones de euros en Sundance.
Fue también un fin de semana de reivindicación de Jane Campion sobre su carrera. Por de pronto, ante las cámaras de Variety, respondió a los comentarios del actor Sam Elliott, que en el podcast WTF había atacado al wéstern por sus “alusiones a la homosexualidad” y aseguró que Campion no tenía ni idea de lo que es realmente el Lejano Oeste. La neozelandesa dijo: “Lo siento, me parece que estaba siendo un poco B-I-T-C-H [deletreó P-U-T-A para que no la censuraran]. Él no es un cowboy, es un actor. El Lejano Oeste es un espacio mítico y hay mucho espacio en el rancho. Creo que es un poco sexista. Cuando piensas en la cantidad de increíbles wésterns realizados en España por Sergio Leone... Me considero una creadora. Elliott primero piensa en mí como una mujer o algo menor, y no me parece nada bien”. Campion es la primera directora que es candidata por segunda ocasión a las estatuillas de Hollywood.
¿Y el resto de los favoritos a los Oscar? Los de interpretación parecen ya concedidos para Will Smith por El método Williams, y Jessica Chastain, por Los ojos de Tammy Faye, en protagonistas, y Troy Kotsur por CODA y Ariana DeBose, por West Side Story, en secundarios. Smith —al que aún podría darle un susto Benedict Cumberbatch en una sorpresa parecida a la del año pasado con Anthony Hopkins—, Kotsur y DeBose han ganado todo lo ganable. Y Chastain no se llevó el Bafta, pero porque ni ella ni ninguna de sus rivales en los Oscar eran candidatas al galardón británico, donde triunfó Joanna Scalan, excepcional en Después del amor.
El que ya habrá hecho hueco en su estantería de premio es el japonés Ryûsuke Hamaguchi, con Drive My Car. Menos la Palma de Oro de Cannes lo ha ganado todo, y su campaña, repleta de humildad al estilo Bong Joon-Ho, es triunfal: el Oscar a mejor película internacional ya podría tener la placa con su nombre. Aunque antes habrá que votar: los miembros de los Oscar realizan sus elecciones del 17 al 22 de marzo.