El estudio Paramount gana el juicio por los derechos de la secuela de ‘Top Gun’
La viuda del periodista israelí cuyo artículo inspiró la exitosa cinta original demandó a los productores por una supuesta violación de los derechos intelectuales
Paramount ha salido airoso de la batalla judicial que desató el retorno de Maverick a las pantallas de cine. Un juez desechó la demanda presentada por la viuda del periodista israelí que escribió el artículo que inspiró la cinta de 1986. La familia de Ehud Yonay aseguró que el estudio había violado lo...
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Paramount ha salido airoso de la batalla judicial que desató el retorno de Maverick a las pantallas de cine. Un juez desechó la demanda presentada por la viuda del periodista israelí que escribió el artículo que inspiró la cinta de 1986. La familia de Ehud Yonay aseguró que el estudio había violado los derechos de propiedad intelectual al realizar la secuela, Top Gun: Maverick, que se convirtió en un éxito mundial en 2022 recaudando más de 1.500 millones de dólares en taquilla. La sentencia afirma que muchos elementos de la segunda parte, entre ellos la trama, el tema y los diálogos, no tenían que ver con Top Gun. Una de las pocas coincidencias es que ambas tenían como centro de gravedad la escuela de pilotos de la Fuerza aérea estadounidense.
El juez Percy Anderson aseguró en su decisión que muchos de los elementos en los que se apoyaba la demanda de la familia Yonay no estaban cubiertos por los derechos de propiedad intelectual. “Las ideas generales de la trama, escenas de archivo y algunas temáticas generales y escenas, situaciones o incidentes no gozan de ninguna protección”, asegura el fallo de 14 páginas recogido por The Hollywood Reporter, la publicación especializada en la industria del entretenimiento. Anderson emitió su fallo el viernes, y fue recogido por la prensa el lunes.
Marc Toberoff, el abogado que representaba a la familia Yonay desde 2022, ha afirmado en un comunicado que apelará a la decisión de Anderson. Los herederos de Ehud enviaron una carta a Paramount en mayo de aquel año, semanas antes del estreno del largometraje, advirtiendo que el lanzamiento podría infringir la legislación sobre copyright porque los derechos de la historia habían vuelto a la familia en enero de 2020. “La familia tiene derecho a reclamar daños y perjuicios (...) en forma de ingresos, ganancias y beneficios”, aseguró entonces Toberoff. Paramount respondió asegurando que la película no se derivaba directamente de la original, por lo que no debía adquirir nuevamente los derechos sobre el texto periodístico.
La decisión del juez ahora afirma que el ritmo y la secuencia de los eventos de Top Gun: Maverick tiene poco que ver con la cinta original, estrenada 36 años antes, y la publicación original firmada por Ehud Yonay. El reportaje, por ejemplo, contaba los hechos ocurridos en la estación aérea naval de Miramar, de San Diego (California) de una forma no lineal, saltando en el tiempo y centrándose en dos pilotos, Yogi y Possum. En cambio, la entrega más reciente, dirigida por el cineasta Joseph Kosinski, contaba una historia lineal que se desarrollaba varios años después y centrada en una nueva camada de pilotos de la estación aérea naval de la Isla del Norte, también en San Diego.
El archivo de la demanda despeja el camino para la tercera entrega del piloto Pete Mitchell, mejor conocido como Maverick e interpretado por Tom Cruise. La cinta está actualmente en preproducción dentro de Paramount. El guion es de Ehren Kruger, el mismo que hizo la exitosa segunda parte. Los ejecutivos están en negociaciones para que Kosinski vuelva detrás de la cámara. La prensa especializada no descarta que la producción de la cinta se complique si es que Paramount es adquirida por SkyDance. Los dos gigantes del entretenimiento están discutiendo actualmente la operación sobre el destino de uno de los estudios clásicos de Hollywood.
Lo que es un hecho es que el nombre de Ehud Yonay no aparecerá en los créditos de la tercera película de la saga. El juez Anderson ha enterrado esos días esa posibilidad al afirmar que el periodista no tiene derechos sobre el universo de Maverick.