Ducati abre la puerta a Lorenzo ante la renuncia de Dovizioso
El piloto de Forli y la fábrica italiana, que no descarta al español para 2021, se separan tras ocho temporadas y tres subcampeonatos del mundo
Andrea Dovizioso no seguirá ligado a Ducati el año próximo. Así lo explicó el piloto este sábado en el circuito de Spielberg, aunque no quiso detallar los pormenores del porqué de su decisión –“No es momento de responder muchas preguntas, lo que quiero es correr y no crear tensiones en el equipo”, declaró– cuando se esperaba todavía que fuera el equipo el que hiciera un movimiento de acercamiento. “Hay varias maneras de correr, la mía es hacerlo siempre para jugarme el campeonato. No es que con Ducati se corra por correr, pero no se dispusieron las cosas como para seguir adelante con el proyec...
Andrea Dovizioso no seguirá ligado a Ducati el año próximo. Así lo explicó el piloto este sábado en el circuito de Spielberg, aunque no quiso detallar los pormenores del porqué de su decisión –“No es momento de responder muchas preguntas, lo que quiero es correr y no crear tensiones en el equipo”, declaró– cuando se esperaba todavía que fuera el equipo el que hiciera un movimiento de acercamiento. “Hay varias maneras de correr, la mía es hacerlo siempre para jugarme el campeonato. No es que con Ducati se corra por correr, pero no se dispusieron las cosas como para seguir adelante con el proyecto”, asumió el corredor, que no tiene todavía un plan B aunque reconoció que lo que le gustaría es seguir compitiendo.
Hecho el anuncio se supo, además, que la fábrica de Borgo Panigale, que no quiere perder a dos de los jóvenes talentos de la parrilla que ya compiten con una Desmosedici en sendos equipos satélite, Pecco Bagnaia y Johann Zarco, no descarta por otro lado que Jorge Lorenzo, actualmente parado, vuelva a integrar su equipo oficial, como hizo durante las temporadas 2017 y 2018.
Mientras las grandes fábricas del Mundial de Motociclismo se apresuraban durante el pasado invierno para atar a sus grandes figuras, como ocurrió con Márquez y Honda o con Viñales y Yamaha; mientras algunos agitaban el mercado, caso del fichaje de Quartararo por Yamaha o, posteriormente, de Pol Espargaró por Honda, Ducati se mantenía de brazos cruzados, oteando el horizonte. Y el número uno de su equipo, Andrea Dovizioso, el hombre que más y mejor le ha plantado cara al todopoderoso Márquez en las últimas temporadas –fue tres veces subcampeón en los últimos tres años–, aguardaba encerrado en casa, a la espera de que empezara el campeonato y de que llegara alguna oferta. De Ducati o de cualquier otro equipo de MotoGP. Pero las ofertas no llegaron. Desde que volvieron las carreras a mediados de julio tanto Dovizioso como Ducati han reconocido que tenían pendientes las negociaciones sobre la renovación de un contrato que expira este mes de diciembre. No han llegado a acuerdo alguno y la relación entre ambas partes concluirá pues a final de año.
“Cuando tiene sentido seguir, te esfuerzas por hacerlo”, asumió Dovizioso. Pero, según sus palabras, este no era el caso. Aunque ni él ni su representante, Simone Battistella, entraron en detalles, sí rechazó este último que se tratara de una cuestión económica. Es más, no se produjo siquiera una discusión formal sobre los términos de la renovación del contrato.Tal y como confirmó el director del equipo, Paolo Ciabatti, Dovizioso no quiso esperar dos semanas, el plazo que se habían dado ambas partes para decidir sobre el futuro: “Queríamos esperar a la segunda carrera aquí en Austria para tomar una decisión. Pero ellos han preferido decidirlo ya para tener libre la cabeza y centrarse en la competición”, afirmaba a los micrófonos de DAZN.
“Ahora, tanto el piloto como el equipo podrán centrarse en el campeonato”, afirmó Battistella. Y en la misma línea se expresó Ciabatti: “Hemos ganado 13 carreras juntos, esperemos que lleguen más. Somos, por detrás de Márquez, el binomio con más éxito en MotoGP en los últimos años. Tenemos 11 carreras por delante para intentar ganar la temporada. Este es un campeonato bastante extraño y se puede lograr”. Es el sentir de Dovizioso, que aspira a pelear por el Mundial como lo ha hecho en los últimos años.
La puerta que se cierra para Dovizioso –aparentemente, tiene tan solo dos opciones: fichar por Aprilia o retirarse a los 34 años–, se abre sin embargo para Jorge Lorenzo (33 años), que está parado tras renunciar el pasado noviembre al último año de contrato que tenía con Honda. “No tenemos todavía tomada la decisión sobre quién será el sustituto de Dovi. Tenemos algunas opciones, las valoraremos y tomaremos una decisión antes de la carrera de Misano [el 13 de septiembre]. Queremos seguir con Pecco y Zarco, pero veremos qué pasa. Por ahora no hay ningún acuerdo con Lorenzo, pero su nombre está sobre la mesa. Puede que todavía sea una opción”, asumió el director del equipo. La excelente relación entre Lorenzo y el responsable técnico del desarrollo de la Ducati, Gigi Dall’Igna –“Al final, el que decide el futuro de Ducati es Gigi”, había dejado caer Dovizioso justo un día antes de anunciar su adiós–, obliga a considerar como factible el regreso del 99, que se fue de la fábrica italiana tras un año marcado tanto por su mala relación con el director ejecutivo de la casa boloñesa, Claudio Domenicali, como por sus primeras victorias con la Desmosedici. Tres triunfos que llegaron precisamente después de certificar su marcha.